LENGUA DE LOS VASCONES.
Al parecer se hablaba un idioma vasco antiguo desconocido diferente al celta que vino después. No obstante el idioma vasco tuvo cierta influencia del celta posteriormente, al igual que del íbero después.
Después se convirtió en el llamado Aquitano.
Las conclusiones que Caro Baroja saca sobre los idiomas hablados en la Iberia a la llegada de los romanos son:
1. Que en el siglo I a. de J.C. en el extremo sur de España se hablaba un idioma libio.
2. Que en el valle del Guadalquivir se hablaba también fenicio.
3. Que el latín ya iba dominando en proporciones considerables por toda Hispania.
4. Que en el centro, oeste y noroeste se hablaban idiomas célticos desde hacia varios siglos.
5. Que desconocemos la naturaleza del idioma en que están ciertas inscripciones del sur, pero que Estrabón nos dice que no era el mismo que el del resto de la Península.
6. Que es lícito pensar que en el norte se hablaba una lengua difícil a oídos griegos y latinos, que pudiera ser la generadora del vasco.
7. Que en la región pirenaica es donde se encuentran los vestigios más claros de que se habló un idioma parecido al vasco.
Las inscripciones en lápidas halladas en Escanau (Valle de Arán, Lleida) presentan un aire aquitano que contienen al menos dos nombres euskéricos: Ilurberrixo y Anderexo, se tratarían de las primeras palabras escritas en euskara.
Los antropónimos aquitanos parecen claramente relacionados con sustantivos y adjetivos vascos:
Andere, Andre, Annere – andere ‘señora’
Cison, Cisson, Gison – gizon ‘hombre’
Nescato – neska-to ‘muchacha’
Sembe, Sembi, Xembe – seme ‘hijo’
Hana, Hanna – anaia ‘hermano’
Ombe – ume ‘criatura’
Atta – aita ‘padre’
Seni – sein, sehi ‘mozo’
Hars – hartz ‘oso’
…
Esto ha definido durante décadas la filiación lingüística de la antigua lengua aquitana, la cual se ha emparentado sin demasiados problemas con la lengua vasca (entre el centenar de bases antroponímicas indígenas, habría una veintena de correspondencias). Luego, se determinan las variantes dialectales o fonéticas ibéricas y aquitanas para poder establecer un margen de variabilidad en el momento de comparar los formantes antroponímicos aquitanos con los formantes antroponímicos ibéricos, y la conclusión en este caso es que las posibles correspondencias iberoaquitanas pueden llegar a casi triplicar las vascoaquitanas:
adin – atin, Adin (Tsal); vasco adin ‘edad’
Baese(r), Beisir – baise(r), Baesi
Belex, beles – beleś, Beles; vsc. beratz ‘suave’
bels – bels, bels; vasco beltz ‘negro’
Bi(h)ox, Bihos – bioś, βιος; vsc. bihotz ‘corazón’
Bors, Bort, borse – bors; vsc. bortz ‘cinco’
Enne – en(a), Enne, Enna; v. medieval Enne-ko
Ilun – iltun/ildun, illun, ιλδυν; vsc. ilun ‘oscuro’
Laur – lauŕ, Laur; vasco actual lau(r) ‘cuatro’
Soson – sosin, Sosin, Sosu(n), susin
Talsco, Halsco – talsko, talsku
etc.
Se tienen muy pocos textos completos, aunque sí inscripciones sobre piedra de aproximadamente 400 antropónimos y 70 teónimos aquitanos, muchos interpretables desde el euskera moderno.
Algunos de los nombres son los siguientes:
Umme sahar (Lerga, Navarra), leído por Marcos Pous (1960) y Koldo Mitxelena como Umme saharri (trad. "al hijo mayor") o como nombre personal Ummesahar por Joaquín Gorrochategui.
Narhungesi (Lerga, Navarra), equivalente al Narhonsus aquitano.
Abisunhari (Lerga, Navarra), sin paralelos, pero terminando en -har con aspiración después de una nasal, al igual que en Aquitania
Dusanharis (Sofuentes, Zaragoza)
Serhuhoris (Valpalmas, Zaragoza)
Eihar (Tabla de Contrebia), defensor de Salluienses en el litigio del uso del agua.
Uxama Barca (Espejo, Álava), si bien el primer componente significa "superior" en celta, el componente Barca podría ser interpretado mediante un derivado del vasco ibar (valle).
Illuna (o Eluna, en Trespuentes), como antropónimo femenino al estilo de teónimos aquitanos como Ilunni, los cuales se pueden interpretar mediante el vasco ilhun / ilun (oscuro).
Helasse (en Miñano Mayor) es un teónimo de fonética aquitanovasca por la H aspirada, la S geminada y la vocal final.
Beltesonis (en Andrearriaga, cerca de Oiartzun, la antigua Oiasso vascona), relacionado con el vasco bel-, beltz (negro).
Losae (Lerate y Cirauqui) y Loxae (Arguiñaniz), relacionado con lotsa (vergüenza).
Larrahe (Mendigorria), con la misma terminación de Artahe y Herauscorritsehe y relacionado con larre (prado).
Lutbelscottio, antropónimo que aparece junto a Sintilla en una estela del pueblo fronterizo de San Román de San Millán (Álava)
Luntbelsar, otro antropónimo que apareció en la misma localidad anterior.
Getaria (en zona várdula según la Geographia de Ptolomeo), es un topónimo relativamente reciente, ya que si su etimología fuese el latín CETARIA (fábrica de salazones de pescado), ofrecería una evolución fonética atribuible al vasco, con sonorización de la oclusiva inicial que además queda sin palatalizar, no sonoriza la oclusiva intervocálica, ni crea -ai- secundario desde -ARIA.
Sesenco (La Laguna, Soria), nombre indígena transparente en euskera (Gómez-Pantoja y Alfaro 2001). En euskera actual, "zezenko" (torete).
DEMOGRAFÍA DE LOS VASCONES.
No existen datos estadísticos de la población vascona en la Antigüedad, pero probablemente no pasaban los 40 000 al comienzo de la dominación romana. Esta creció lentamente durante el período republicano, llegando a los 50 000 para la época de Sertorio.
La Pax Romana les permitió multiplicarse continuamente, hasta alcanzar los 70 000 en el siglo I y los 100 000 a mediados del III.
Posteriormente, las invasiones bárbaras y guerras civiles debieron reducir su número, tal vez a solo 60 000 vascones para inicios del siglo V. Sus principales centros urbanos y de romanización fueron Pompaelo y Calagurris, con diez mil habitantes cada una en su época de esplendor, seguidas por Graccurris y Tutela con alrededor de cinco mil cada una, y con ciudades menores de un par de miles de habitantes como Andelos, Cara, Cascantum, Curnonium, Ergavia, Iaca, Iluberri, Muscaria, Nemanturissa, Oiasso, Segia, Tarraga y Vareia.
EL PRINCIPIO DE VIZCAYA COMO ENTIDAD.
En los albores del primer milenio después de nuestra era se fue formando un núcleo católico, que luchó contra la ocupación musulmana y a veces también, entre ellos mismos, pugnando por el poder y el dominio de más riquezas, y tierras.
Se formó en dos núcleos diferentes, en Cantabria (futuro Reino de Asturias) y en Pamplona, después llamado Reino de Navarra, que fue pugnando contra el después llamado, Reino de Castilla, en cuanto a sujeción a estas tierras vascas.
Posteriormente sobre el año 1000 como decíamos, hubo tres reinos: Reino de Navarra, Reino de Castilla y Reino de León.
No obstante, por esos años desapareció el Reino de León para formarse el Reino de Aragón. Desde principios del 1200, se puede decir que quedarían solo los reinos de Navarra, Aragón y Castilla, hasta la unión de todos los reinos a principios del siglo XVI.
En esa España vivirían unos 4 millones de personas y en el territorio vasco, solo se contarían por miles y muy desperdigados.
La península ibérica en 1150.
Hemos de decir que según la crónica de Alfonso III de Asturias (866-910), se mencionan los repoblamientos que tuvieron lugar en época de Alfonso I y explica que el territorio no fue afectado por estas. Literalmente dice que: "Álava, Vizcaya, Alaone y Orduña fueron siempre poseídas por los suyos del mismo modo que Hayo, Pamplona y La Berrueza".
La siguiente ocasión en la que se menciona a Vizcaya es en el Códice de Roda del 990. Se relata la boda entre doña Velazquita, hija del rey Sancho Garcés I de Pamplona (905-925), y un tal Munio Vélaz, emparentado con la familia real de León y de Pamplona, era conde de Álava hasta el mar, en Vizcaya. Vizcaya adquiriría así una personalidad política, apareciendo como condado navarro.
Este tal Munio Vélaz, pudo ser hijo del conde Vela Jiménez, quien se enfrentó a los ejércitos musulmanes liderados por Al-Mundir de Córdoba en 882 y en 883 y los derrotó en este último año en la batalla de Cellorigo.
Los únicos condes que gobernaron Álava, o los condados alaveses de Cerezo y Lantarón, fueron Vela Jiménez, Munio Vélaz, Gonzalo Téllez, Fernando Díaz y Álvaro Herraméliz. A partir de 932, el conde Fernán González ejerció el gobierno de Álava junto con el de Castilla.
Desde el año 1051 en que Íñigo López Ezquerra aparece como conde de Vizcaya, el topónimo está registrado ininterrupidamente en los documentos. En ese momento Vizcaya sería un condado del Reino de Navarra, pero su conde sería ad imperandum, no ad possidendum, lo que implica que el poder real habría sido delegado en la persona del conde, por lo que Íñigo López Ezquerra sería conde en Vizcaya, no conde de Vizcaya, aunque los condados podían convertirse en hereditarios, pero siempre por la voluntad del rey.
En el año 1072 Íñigo López Ezquerra (1028-1076), navarro, dejó de firmar como conde y empezó a llamarse señor de Vizcaya, título que él mismo convertiría en hereditario al igual que Ramiro Sánchez haría con el Condado de Aragón.
En 1076, tras la muerte de Sancho Garcés IV de Pamplona, al iniciarse la guerra entre Alfonso VI de León y Sancho I de Aragón y V de Navarra, López Ezquerra entregó al rey leonés la fortaleza de Bilibio, de la que era dueño y que era la llave de toda La Rioja, unió sus huestes a las del leonés y ayudándole a conquistar La Rioja. En agradecimiento el rey le permitió conservar sus posesiones de Bilibio y, a cambio de Nájera, de la que Íñigo también era señor, le prometió respaldar sus ambiciones sobre el Duranguesado, Álava y parte de Guipúzcoa.
El duranguesado. Componían la Merindad de Durango las anteiglesisas de Abadiano, Bérriz, Mallavia, Mañaria, Yurreta, Garay, Zaldívar, Arrazola, Axpe, Apatamonasterio, Izurza y San Agustín de Echevarría. Las villas eran Durango, Elorrio, Ermua y Ochandiano.
En 1076 el rey Alfonso VI de Castilla toma Vizcaya al Reino de Navarra.
Íñigo murió en 1077 y su hijo Lope Íñiguez heredó el señorío, al que a su vez sucedió su hijo Diego López I de Haro, el Blanco, quien fue señor hasta 1124, en que fue derrotado y posiblemente muerto por las tropas de Alfonso I el Batallador, rey de Navarra y Aragón en la invasión de Vizcaya, en los últimos años de reinado de Urraca en León y Castilla, exesposa de este último. Con ello Vizcaya se integró en su reino y puso al frente del señorío a Ladrón Íñiguez, uno de los más poderosos nobles de la corte navarra.
Desde 1110 les fue reconocido a los señores de Vizcaya mantener total jurisdicción sobre su tierra, incluidos los casos reservados a la justicia real, e iniciando en 1199 una serie de fundaciones de villas y dotación de fueros que finalizó en 1376, cuando el infante don Juan de Castilla, señor de Vizcaya y futuro Juan I, fundó las villas Munguía, Larrabezúa y Rigoitia.
Retorna de nuevo Vizcaya en 1134, al Reino de Navarra.
A la muerte de Ladrón Íñiguez, en 1155 le sustituyó su hijo Vela Ladrón (1115-1174), quien también fue señor de Álava y Guipúzcoa, que gobernó durante los reinados Alfonso I, García Ramírez y Sancho VI "el sabio", aunque en ese tiempo Lope Díaz I de Haro el de Nájera se intitulaba señor de Vizcaya y reclamaba su legitimidad aunque nunca llegó ni siquiera a pisar Vizcaya.
En 1173 Alfonso VIII de Castilla atacó el reino de Navarra, y un año después falleció Vela Ladrón, momento de debilidad que el monarca castellano aprovechó para ocupar Vizcaya y restituir a los Haro al frente del Señorío, en la persona de Diego López II de Haro el Bueno (c 1152-1214).
Diego López II de Haro el Bueno.En 1176 Navarra y Castilla firmaron la paz con un laudo arbitrado por Enrique II de Inglaterra que delimita las fronteras de los reinos, quedando Vizcaya dentro de Navarra. El laudo fue ratificado en 1179 cuando se hicieron unas divisiones más detalladas de las fronteras. La margen izquierda del río Nervión y la raya con el río Bayas quedaron en Castilla, mientras que Vizcaya, el Duranguesado y Álava casi entera en Navarra. Sin embargo, había cierta indefinición, porque Vizcaya, que pertenecía a Navarra, no obstante era gobernada por un vasallo del rey de Castilla. Pero por sorpresa Diego II se pasó al bando navarro, donde permaneció hasta 1183, cuando el rey castellano le ofreció el título de alférez de su corte, título que le fue retirado tras el desastre de Alarcos en 1195. Para tratar de congraciarse con el rey de Castilla le ayudó en 1200 en la conquista de Álava, de la que fue nombrado señor, pero este hecho no les acabó de reconciliar ya que al año siguiente pasó de nuevo al servicio de Navarra, a la que fue leal hasta 1206, año en que volvió ya definitivamente a la corte castellana como alférez real de Castilla. Vizcaya permanecería, con alguna excepción, (Diego López III de Haro) ya siempre en la órbita castellana, pero sin llegar a integrarse del todo en el reino, lo que alimenta la controversia arriba mencionada.
En 1200 Vizcaya, vuelve a ser conquistada por los castellanos, esta vez definitivamente.
El puerto de Plencia obtuvo el rango de villa en 1239 por concesión de Lope Díaz II Señor de Vizcaya, siendo confirmada por su nieto Diego López V de Haro en 1299, se le concedieron los términos para cazar ballenas desde Portugalete hasta Baquio.
1275- Iñigo Ortíz de Ibargüen, tuvo guerra con su primo Ochoa de Butrón, la cual comenzó en vida de sus padres, que eran hermanos. Fue llamado a la Corte. Al regresar, pidió ayuda a Fortún Sánchez de Zamudio el de Susunaga, con cuyo apoyo peleó en Altamira contra los de Butrón, y mató a Ochoa de Butrón y a su hijo Ochoa, pereciendo en el combate a manos de este último.
En el siglo XIII los reinos de Navarra y Castilla entran en disputa por los occidentales de Navarra, Sancho el Sabio de Navarra y Alfonso VIII de Castilla acuden a Enrique, rey de Inglaterra, para que arbitre sobre esos límites, aunque el rey de Inglaterra no dice nada, dos años después ambos reinos llegan aun acuerdo en el que el territorio del duranguesado permanece en Navarra mientras que el resto del territorio vizcaíno queda incorporado a Castilla. En 1212 Alfonso VIII de Castilla cede el Duranguesado al Señor de Vizcaya, Diego López II de Haro, como recompensa por los servicios prestados en la Batalla de Las Navas de Tolosa integrándose en el mayorazgo de Vizcaya.
En el año 1330, en Vizcaya la familia de los Ibargoyen fue invitada por la familia rival de los Zaldívar a una comida de reconciliación. Sin embargo, una vez sentados los quince miembros de Ibargoyen, los de Zaldívar pidieron sal para la comida, lo cual resultó ser la señal para que salieran cincuenta hombres bien armados que asesinaron en un momento a todos sus invitados rivales. Este capítulo es conocido como "la Sal de Ibargoyen".
En 1334, el rey Alfonso XI de Castilla penetró en el territorio y obligó al Consejo de Guernica a que le aceptase como señor. El Señorío de Vizcaya fue heredado por los descendientes de Diego López III de Haro, hasta que en 1370 recayó por herencia materna en el infante Juan, que heredó de su padre el Reino de Castilla, como Juan I, permaneciendo el señorío desde entonces ligado a la Corona, primero a la de Castilla y luego, desde Carlos I, a la de España, siempre con la condición de que el señor de turno jurase defender y mantener los fueros del Señorío (los fueros de Vizcaya), que en su texto afirmaban que los vizcaínos podían desobedecer al señor que así no lo hiciera.
1356- Salazar explica como don Tello, tratando de defender a los vizcaínos de las incursiones de los guipuzcoanos, decidió fundar una villa en los llanos de Elorrio en 1356.
"... por que nos dijeron que cada que acaesciere que los de Guipuzcoa han á entrar a robar, é facer mal é daño alguno en el nuestro Señorio de Vizcaya han la entrada por el nuestro llano de Elorrio, é que faciendose una Villa en el dicho llano que non podria haver otra entrada tan presta, é que por esta razon se excusarian de facer muchos robos, é males, é furtos en el nuestro Señorio de Vizcaya.... é porque esto es nuestro servicio tenemos por vien que se pueble la dicha Villa en el dicho llano de Elorrio, é que todos los fijos dalgo é labradores que hi quisieren entrar a morar que vengan e moren... é de estos bos mandamos dar este nuestro previllejio sellado con nuestros sellos de cera colgados: dado en Bilbao a 27 dias de Junio Hera de 1256 años."
Explica cómo don Tello mató a Juan de Avendaño:
"En el año del Señor UCCCLVI (1356) años, mató el Conde D. Tello, Señor de Viscaya, a este Juan de Avendaño, en la Villa de Viluao dentro de su palacio, e echolo de las ventanas a la plaza, e la causa de su muerte fue porque facía muchas osadias en Viscaya no preciaua nada al Señor; e la postrimera causa de su muerte fue porque este Conde D. Tello, que era mucho montero, tenia dose puercos monteses en Alouiña, e echolos a la plaza de Viluao, e cavalgo en un cauallo, e nunca lo pudo meter entre ellos espantandosele dellos, e dixole aquel juan de Avendaño: Señor, dexadme cavalgar en ese cavallo e yo lo faré saltar sobrellos a pesar de sí, e diogelo e cavalgó en él. E como era ome endiablado, pusoles las espuelas e fizole saltar sobre aquellos puercos... E descaualgando, e subido el Conde a comer, no faltó quien le dixo que no era para el mundo si tales cosas soportava... e viniendo este Juan de Avendaño al palacio después de comer, fue luego muerto a porradas, e echado por la ventana a la calle, como dicho es."
1362- Sobre Bilbao y villas de alrededor comentó las peleas que en ellas se entablaron y sus causas:
"En el año del Señor de UCCCLXII (1362) años pelearon los de Vasurto e de Asúa con los Fuertun Ibañes de Urista e con Sancho Ybañes, su hermano, e morieron de los de Vasurto, Sancho de Vasurto, fijo de Diego Sanches, e Diego de Durandi, e Rodrigo de Asua. E morieron de los de Urista, Sancho Sanchez de Urista, e Sancho Artule, e ovo muchos feridos de anbas las partes. En este dia mesmo mataron en la Talaya de Viluao, Juan Sanches Ibarra, e Juan Durieta, e Juan Ochoa de Ybarra, que eran de Liguizamon, a Juan Martines de Loega, el mozo, e esta fue la primera sangre vertida entre Leguizamon e Zurbaran, por donde sucedió e secede enemistad e omecidios fasta oy entre ellos."
1364- También sabemos algunos capítulos de las guerras de banderizos, en los que este linaje se ve implicado, como por ejemplo este: “Sábado, XXI de desiembre, era de mil CCCC II años (1364), fino don Juan Sanches de Velaostegui. Este día murieron Sancho de Basurto, fijo de Diago Sanches, e Diago de Durandio, e Rodrigo de Asúa, en la pelea que ovieron con Fortun Ibañes d’Iruixta, e Sancho Ibañes su hermano; e de la parte de Fortín Ibañes, murió Sancho Arcule”.
1370- Otro cruel y trágico suceso aconteció en 1370, cuando el gamboíno Juan López de Gamboa violó las más elementales leyes de hospitalidad, que se tenían entonces por sagradas. Dicho Gamboa se acercó sigilosamente a la casa de sus rivales de la villa vizcaína de Marquina, hoy Markina-Xemein, donde se encontraban el señor principal, dos hijos suyos y ocho de su bando, procedió acto seguido a quemarla, y perecieron dentro de la casa todos sus ocupantes.
En 1379 el rey Juan I de Castilla se convirtió en señor de Vizcaya, por herencia materna, quedando dicha titularidad integrada definitivamente en la corona de Castilla y luego en el reino de España, titulación que estará unida bajo los mismos monarcas, pero Castilla y Vizcaya estarán separadas administrativamente, cada soberanía conservará su identidad y leyes, las cortes castellanas permanecerán separadas de las vizcaínas. Vizcaya tuvo bandera naval propia, casa de contratación y consulado en Brujas. También tuvo dos aduanas en la frontera con Castilla, en Valmaseda y Orduña.
Sobre 1380, Martín Sánchez de Palacio, II Señor de Palacio, altivo banderizo, que ya en su juventud destaca como aguerrido luchador en las guerras de linajes, siendo con su primo, el jefe de la Casa de Ybargoen, protagonista de la cruenta Junta celebrada en Avellaneda en 1406 bajo la presidencia del Corregidor de Bizkaia, doctor Gonzalo Moro. Estuvo casado con Teresa de Salazar, hija de Juan Sánchez de Salazar y Muñatones (muerto en 1399 por los Marroquines, enemigos del linaje). Martín Sánchez de Palacio murió en el año 1451, asistiendo a su sepelio Lope García de Salazar, el poderoso Señor de Muñatones e ilustre cronista.
1393- Gonzalo Gómez de Butrón fue quien dio origen a las luchas con los Abendaño. En 1393 había matado a su deudo Juan Sánchez de Villela. El hijo del muerto pidió ayuda a los Abendaño que eran parientes de ambas casas. Este Gonzalo Gómez, en su testamento de 1407 instituía el mayorazgo de la casa de Butrón. Y mandaba que, a costa de sus bienes, se enviara un romero a Jerusalén y se aplicara este acto por el alma de Juan Sánchez de Villela, a quien había matado en 1393.
Y como Juan de Avendaño y Juan López de Gamboa entraron en Bilbao y tuvieron pelea con los de Butrón:
"En el año del Señor de UCCCCXI (1411) años, entró Juan de Avendaño, fijo de Martín Ruys de Avendaño en la Villa con poderosa gente, e tenía por el al linaje de Liguizamón, e cercó a Ochoa Peres de Arvolancha en la torre de la plaza de Juan Sanches de Aruolancha, su hermano... e fueron muertos e feridos muchos ombres de anbas las partes e fue ferido el dicho Juan de Avendaño con una saeta por los guargueros en lo vasio, e no ovo peligro, e vino doña Maria Alonso, muger de Gonzalo Gomes de Butron con todo el solar en su socorro. por que Gonzalo Gomes era en la Corte e pusose en la Talaya de Viluao e en la Renteria, e vino en su ayuda Ochoa de Salasar con todo su solar, e vino en ayuda de Juan López de Gamboa, su abuelo, y en ayuda de los Butrón, Fortún García de Arteaga, su yerno, obligando a intervenir al Corregidor Doctor Gonzalo Moro, consiguiendo treguas del Rey y volvieron todos a sus comarcas."
1413- Las luchas que se entablaron en los campos de Leguizamon y de Zurbarán:
"En el año del Señor de UCCCCXIII (1413) años, pelearon en el cantón de la Tendería de Viluao los de Ligiçamon, e los de Çurbaran, e morieron los de Ligiçamon, Pedro, fijo de Juan Sanches, Esteban, e Martín de Voliuar, e Rodrigo de Çumelçu, e Ochoa de Ybarrasusi, que eran de Ligiçamon, que los mataron los ballesteros que tenían escondidos en la casa del dicho cantón a saviendas, e fueron muertos antes de que se aperçiuiese, e ovo otros muchos feridos, e fue ferido de los de Çurbaran, Juan Martines de Arana, sobrino de Martín Martínes de Çurbaran, por el ojo, que eran alli anbos los mayores de aquel linaje que lo tenian ordenado, e Recudieron a la pelea Tristan de Ligiçamon, e Floristan, e Galas, fijos de Martín Sanches, e todos los otros, e por estas muertes duro la guerra entre aquellos linajes XX años e mas, que nunca ovieron tregua e ayudaban a los de Çurbaran los de Aruolancha, e Vasurtu, e de Anunçibay, e de foranos ayuduan a Ligiçamon los de Martierto, e los de Çangroniz, e los de Aguirre, e de Artunduaga, e de Cariaga ayudauan a los de Çurbaran los de Gecho, e los de Asua, e Susunaga, e los de Arandia, e de Ysasi, e ovieron guerra continua en la Villa, fuendo e veniendo los unos quando los otros."
Las enemistades eran constantes, Juan de la Guerra y Martín de Leguizamón aprovecharon la pesca de un salmón para matar a Diego Sánchez de Zamudio:
"Diego Sanchez de Vasurto, que era manceuo asas e esforzado, demostró un salmón en la presa de las aseñas de Ybayzaval, e los fijos de Martín Sanchez tomaron redes e fueron con los dichos Juan de la Guerra e Martin de Liguizamon, con todos los mancevos del linaje, que fueron XXVII omes, a Yvayzaval por tomar aquel salmon, e como lo sopo Diego Sanches de Vasurto, pusoseles con unos XV omes en unas casas de mucho mal continente, e dixole: Que si salmon o pescado parecia en Ybayzaval, quellos no tenían alli que faser, e sobre esto venieron en palabras, e poniendo manos a las armas, e encerrose el dicho Sanches en la casa primera, e así entrado dentro, posiendose en una ventana pequeña, diole un ballestero que se llamaba Sancho de Durandio, que era criado de Martín Sanches, e mancevo atrevido, por el ojo devaxo a riba, e saliole por los meollas de la caveza ariba, e cayo luego muerto en el sobrado."
La muerte de Rodrigo Adan de Yarza provocó una oleada de asesinatos en Lequeitio:
"En el año del Señor de UCCCCXIIII 1414) años, mataron los del solar de Arteaga, en la Villa de Liquetio, a Rodrigo Adan de Yarça, nieto eredero de Adan de Yarça, con una saeta por los pechos de esta manera. La Villa desde antigüedad fue a mando e ordenança del solar e linaje de Yarça, e leuantose contra ellos Martín Peres Licona, que era un mercadero mucho Rico, e allego parentela, e fuese al solar de Arteaga, que era vecino, e enemigo de estos de Yarça, e estando algunos lacayos dellos con el, acometieronlos los de Yarça, e pelearon en la calle, e ovo muertos e feridos algunos, e morió aquel Rodrigo Adan de una saeta, que le paso sobre una lóriga de malla a cavo de XX dias, toviendolos çercados en aquella casa con ayuda de los de Aulestia, e de algunos de Muxica, e queriendolos quemar, venieron todos los mejores del solar Arteaga con Juan Peres de Avendaño, el de Urdaybay, que era fijo bastarde de Furtun García, el Viejo de Arteaga, en una madrugada, e con grande osadía e esfuerço, quebrantaron la puerta de la Villa, e peleando e con mucho daño de sus gente, oviendo muchos muertos e feridos, entraron por la villa adelante, e socorrieron a los dichos Martín Peres, e a los que con el estauan de Arteaga, e morio alli Rodrigo de Xagarminaga, que era un buen escudero de los de Arteaga, e otros muchos de anbas las partes, e Recreçiendo gentes con Juan Alonso de Muxica, e con Furtun Garcia de Arteaga, que eran llegados cada uno en defensión de los suyos, e fuendo alli el Dotor Gonzalo Moro, e Ochoa de Salasar, fesieron treguas, e sacaron todos los forasteros de la Villa, e por esta dicha muerte del dicho Rodrigo Adan, que era mayor de Yarça, en edad de XXV años, fue despoblado aquel Martín Peres e los suyos de allí."
1420- Batalla de Lezcano, murieron 150 gamboínos. Los Gamboinos extendieron su feudo con un asalto nocturno a la familia Oñaz, también de Guipúzcoa. En Navidad, el feudo de los Oñaz empezó a arder y el jefe de la casa más otros nueve individuos murieron en el incendio. Las tierras de la familia Oñaz también fueron devastadas por los Gamboínos y sus aliados, pero los aliados de los Oñaz salieron en su defensa. De estos últimos, los Lazcano atacaron a la familia Valda, aliada de los Gamboínos, y mataron a su líder. Así, esta pequeña guerra se convirtió en una compleja red de venganzas familiares.
"El año 1427 hubo discordia en la Villa de Bermeo entre Fortún Sánchez de Olabarrieta e Juan Ortiz de Arrescurenaga, seyendo un linaje y parientes, sobre qual valería más al poner de los oficios..."
Al tratar de "como mataron los de Salcedo a Martín Vidal de Gordejuela", dice:
"En el año del Señor mataron los de Alcedo a Martín Vidal, Sobrino de Martín Sánchez de Palacio, en la puente de Sopuerta... e porque Ochoa de Salazar tenía cargo de Martín Sánches de Palacio, e non les ayudaba tan supitamente, fueron a Velasco..."
1446- Batalla de Zumárraga. Los Gamboínos y los Valda lucharon contra los Oñaz y los Lazcano en Zumárraga. Los Oñaz salieron victoriosos y quemaron la fortaleza de los Gamboínos en Azkoitia. Setenta hombres y doce de los líderes fueron asesinados. Las familias, con todas sus amplias redes de aliados, se enfrentan de nuevo en 1447 y 1448.
Quema de Azcoitia.
TERRITORIOS.
La Tierra Llana.
Se entiende por tierra llana la que no tiene murallas; esto es, los campos y caseríos. Estaba organizada en 72 anteiglesias agrupadas en seis merindades:
Merindad de Busturia (26 anteiglesias): Mundaca (1º), Pedernales (2º), Axpe de Busturia (3º), Murueta (4º), Fórua (5º), Luno (6º), Ugarte de Múgica (7º), Líbano de Arrieta (7º), Mendata (9º), Arrazua (10º), Ajánguiz (11º), Ereño (12º), Ibarranguelua (13º), Gautéguiz de Arteaga (14º), Cortézubi (15º), Nachitua (16º), Ispáster (17º), Bedarona (18º), Murélaga (19º), Navárniz (20º), Guizaburuaga (21º), Amoroto (22º), Mendeja (23º), Berriatúa (24º), Cenarruza (25º), Arbácegui (26º)
Merindad de Marquina (2 anteiglesias): Jeméin (27º) y Echevarría (28º)
Merindad de Zornotza (3 anteiglesias): Amorebieta (29º), Echano (30º), Ibárruri (31.º)
Merindad de Uribe (32 anteiglesias): Gorocica (32.º), Baracaldo (33º), Abando (34º), Deusto (35º), Begoña (36º), Echévarri (37º), Galdácano (38º), Arrigorriaga (39º), Arrancudiaga (40º), Lezama (41º), Zamudio (42º), Lujua (43º), Sondica (44º), Erandio (45º), Lejona (46º), Guecho (47º), Berango (48º), Sopelana (49º), Urduliz (50º), Barrica (51º), Górliz (52º), Lauquíniz (53º), Gatica (54º), Lemóniz (55º), Maruri (56º), Basigo de Baquio (57º), Morga (58º), Munguía (anteiglesia) (59º), Gámiz (60º), Fica (61º), Frúniz (62º), Meñaca (63º), Derio (72º)
Merindad de Bedia (1 anteiglesia): Lemona (64º)
Merindad de Arratia (7 anteiglesias): Yurre (65º), Aránzazu (66º), Castillo y Elejabeitia (67º), Ceánuri3 (68º), Dima (69º), Santo Tomás de Olavarrieta (70º), Ubidea (71º),
Varias anteiglesias independientes de facto no tenían, sin embargo, reconocimiento de las Juntas Generales y carecían de representación en las mismas: Alonsótegui, Aracaldo, Basauri, Zarátamo y Zollo
La Tierra llana estaba regida por el uso y la costumbre con el fuero vizcaíno e infanzón.
Las Villas y la Ciudad.
Eran 21 núcleos urbanos amurallados fundados durante la Edad Media. Eran las villas de Valmaseda, Bermeo, Bilbao, Durango, Ermua, Guernica, Lanestosa, Lequeitio, Marquina, Ondárroa, Ochandiano, Portugalete, Plencia, Munguía, Villaro, Rigoitia, Larrabezúa, Guerricaiz, Miravalles, Elorrio y la ciudad de Orduña. Diferenciadas del fuero vizcaíno por los fueros particulares de sus respectivas cartas pueblas, durante algún tiempo llegaron a celebrar sus juntas separadamente de las que celebraba el señorío.
Las Encartaciones.
Las Encartaciones se incorporaron al señorío en el siglo XIII bajo la casa de Haro. Formadas por 10 repúblicas, estaban reunidas en concejos o valles mayores con su propia jurisdicción y gobierno. Formaron junta y adoptaron fuero propio, reducido a escritura en 1394, cincuenta y ocho años antes de que se escribiera el fuero de Vizcaya, que asumirían con posterioridad. Enviaban sus procuradores a las Juntas en Avellaneda. Un representante común a todas ellas acudía a las Juntas Generales cuando se trataban asuntos de interés común o que les afectasen directamente. En el siglo XVII cinco concejos encartados consiguieron representante independiente en las Juntas Generales. En 1804 la Junta de Avellaneda fue disuelta y los concejos encartados incorporados a la Tierra llana. Componían Las Encartaciones los concejos o valles de: Carranza, Trucíos, Arcentales, Sopuerta, Galdames, Zalla, Güeñes, Gordejuela, Los Tres Concejos del Valle de Somorrostro (Santurce, Sestao y San Salvador del Valle) y Los Cuatro Concejos del Valle de Somorrostro (Musques, Ciérvana, Abanto de Suso y Abanto de Yuso).
Señor de Vizcaya | Inicio del mandato | Fin del mandato |
Íñigo López Ezquerra | 1040 | 1077 |
Lope Íñiguez | 1077 | 1093 |
Diego López I de Haro "el blanco" | 1093 | 1124 |
Lope Díaz I de Haro | 1124 | 1170 |
Diego López II de Haro "el bueno" | 1170 | 1214 |
Lope Díaz II de Haro "Cabeza brava" | 1214 | 1236 |
Diego López III de Haro | 1236 | 1254 |
Lope Díaz III de Haro | 1254 | 1288 |
Diego López IV de Haro "el joven" | 1288 | 1289 |
María Díaz de Haro "la buena" | 1289 | 1295 |
Enrique de Castilla "el Senador" | 1294 | 1295 |
Diego López V de Haro "el Intruso" | 1295 | 1310 |
María Díaz de Haro "la buena" (recupera el señorío) | 1310 | 1322 |
Juan el Tuerto | 1322 | 1326 |
María Díaz de Haro "la buena" (vuelve tras la prematura muerte de su hijo) | 1326 | 1334 |
Casa de Haro
Señor de Vizcaya | Inicio del mandato | Fin del mandato |
María Díaz de Haro y Juan Núñez de Lara | 1334 | 1349 |
Casa de Lara
Señor de Vizcaya | Inicio del mandato | Fin del mandato |
Juan Núñez de Lara | 1334 | 1350 |
Nuño de Lara | 1351 | 1355 |
Juana de Lara | 1355 | 1359 |
Isabel de Lara (nominal) | 1359 | 1361 |
Después de los reyes de Navarra y Castilla y de los Señores de Vizcaya, los personajes más poderosos eran los Ayala (Álava), los Salazar y los Butrón.
Fortaleza de los Ayala.
Escudo de los Ayala. Los de este linaje fueron señores del Valle de Ayala, del de Salcedo, Fuensalida y de las Villas de Salvatierra de Alava, Salinillas, Berberana, Mancilla, Cebolla, Condes de Fuensalida y Salvatierra de Alava.
El más fuerte hombre de este linaje fue Pedro López de Ayala, Señor de Ayala y de Salvatierra, y también Merino Mayor de Guipúzcoa.
También tuvo títulos como canciller mayor de Castilla, camarero mayor del rey Pedro I de Castilla, alférez mayor del pendón de la Orden de la Banda, corregidor y alcalde mayor de Toledo, merino y alcalde mayor de Vitoria y oidor de la Audiencia Real en el reinado de Juan I de Castilla.
El pago por su lealtad en mercedes no era despreciable: amén de los señoríos de Arceniega, Torre de Valle de Orozco y Valle de Llodio, ricos, fértiles y pintorescos lugares, fue designado miembro del Consejo Real.
BUTRÓN.
La casa-torre construida a mediados del siglo XI, y posteriormente su torre de mediados del siglo XIII, ponen a Butrón como otro de los linajes emparentados con los Salazar más poderosos de la zona. Los Butrón eran descendientes de la Casa de Haro mediante Diego López de Haro "el Blanco", VIII señor de Vizcaya, Alava, Najera y Haro. Enlazaron con los Salazar Muñatones como parte de una estrategia, para no guerrear por Baracaldo.
LINAJE BUTRÓN.
- Sancho Díaz, señor de Tovia, nacido hacia el año de 1110. Murió en 1169. Contrajo matrimonio con María Díaz Duque y fueron padres de Diego Sánchez del cual proviene el linaje de Rojas y Juan Sánchez, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Juan Sánchez, nació hacia el año de 1130 y fue padre de Ochoa Ibáñez, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Ochoa Ibáñez, nació hacia el año de 1150, pobló y vivió en Aranguiz. Fue padre de Pedro Ochoa de Aranguiz, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Pedro Ochoa de Aranguiz, señor de este antiguo Solar, nació hacia 1170. Tuvo varios hijos siendo Juan Pérez de Aranguiz el segundo legítimo, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Juan Pérez de Aranguiz, nació en Aranguiz, Vizcaya, hacia el año de 1190. Pobló y vivió en Villela y fue padre de Juan Sánchez que heredó el solar de Villela, Iñigo Ortiz que pobló Ibargüen y Juan Pérez que pobló en Butrón y fundó esta noble Casa Solar, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Juan Pérez de Butrón, I señor de la casa de Butrón, nació en Aranguiz, Vizcaya, hacia el año de 1210. En él comienza Esteban de Garibay la genealogía de la Casa de Butrón, y manifiesta que vivió en tiempo del Rey Alfonso X de Castilla, siendo gran privado del Conde Lope, Señor de Vizcaya. Fue, en efecto, Rico-hombre del Rey Alfonso X de Castilla, y como tal confirmó privilegios del Monarca. Contrajo matrimonio con Emilia de Estrada, perteneciente esta al linaje del Reino de Asturias. Fueron padres de Ochoa Ibáñez de Butrón, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Ochoa Ibáñez de Butrón, II señor de la casa de Butrón, nació en Butrón, Vizcaya, hacia el año de 1230. Contrajo matrimonio con Toda Ibáñez de Valmaseda, Señora de Cortezubi, hija de Juan Ortíz de Valmaseda, tesorero del Rey. Fueron padres de Ochoa de Butrón y de Gómez González de Butrón, sigue en la línea descendiente de parentesco. Ochoa Ibáñez de Butrón murió con su hijo primogénito Ochoa, en la batalla de Altamira el año de 1275.
- Gómez González de Butrón, III señor de la casa de Butrón, heredó el Solar tras la muerte de su hermano primogénito. Nació hacia el año de 1260, en Butrón. Fue Señor de la casa de Gorte-Zubi, de la mitad de los palacios de la calle Vieja de Balmaseda y de las casas de Burgos. Contrajo matrimonio con Mayor de Abendaño, hija de Juan Pérez de Abendaño, III Señor de Aramayona, Urkizu y Arrieta. Fueron padres de Ochoa de Butrón, sigue en la línea descendiente de parentesco.
- Ochoa de Butrón, IV señor de la casa de Butrón, nació en Butrón hacia el año de 1300. También conocido como Ochoa de Villela. No se ha encontrado con quien contrajo matrimonio pero tuvo como hijos legítimos a Gonzalo Gómez de Butrón, sigue en la línea descendiente de parentesco, Juan Gómez de Butrón que heredó y fundó la Casa y linaje de Meñaca, Pedro González de Butrón, que se asentó en Gámiz, Ochoa Pérez de Butrón que fundó la Casa de Butrón en Plasencia, y dos hijas que contrajeron matrimonio con Martín Ortiz de Martiartu y Juan Sáez de Asúa.
- Gonzalo Gómez de Butrón, V señor de la casa de Butrón, nació en Butrón hacia el año de 1340. Fue Señor de los palacios de Balmaseda y sus patronatos de Vizcaya. El año de 1393 dio muerte a Juan Sánchez de Villela, señor de la Casa de Villela. Su hijo también llamado Juan Sánchez, para vengar la muerte de su padre, solicitó ayuda a los señores de Villa-Real, Juan de San Juan y Martín Ruiz de Avendaño, que a pesar de ser parientes del Butrón, favorecieron al de Villela, quedando enemistadas las familias. Los de Butrón tomaron parte en el bando de los oñacinos y los de Avendaño en el bando de los gamboínos que lucharon por muchos años en las Guerras de bandos. Gonzalo Gómez de Butrón, murió en 1423 sirviendo al rey Juan II de Castilla en el sitio de San Vicente de la Sonsierra, entonces plaza navarra. Contrajo matrimonio con Elvira Sánchez Zamudio, señora de la Casa de Ibargüen y Ochandategui, hija de Ordoño de Zamudio, señor de la Casa de Zamudio, de San Martín de Arteaga y Torres de Salcedo y de Mencia de Las Ribas, señora de la casa solar de Ibargüen, bisnieta de Iñigo Ortiz, hermano de Juan Pérez de Butrón, I señor de la Casa de Butrón. Fueron padres de Gonzalo Gómez de Butrón, sigue en la línea descendiente de parentesco y María de Butrón, señora del Palacio de Balmaseda, que contrajo matrimonio con Sancho Sánchez de Velasco, señor de la Revilla.
- Gómez González de Butrón, VI señor de la casa de Butrón, nació en Butrón hacia 1370. Murió el año de 1435. Contrajo matrimonio con María Alonso de Múgica, III señora de la Casa de Múgica y VII del Valle de Aramayona, hija de Juan Alonso de Múgica, señor de la Casa de Múgica y de Juana González de Agüero. Fueron padres de Gómez González de Butrón y Múgica, sigue en la línea descendiente de parentesco, Juana de Butrón y Múgica que contrajo matrimonio con el cronista de la época Lope García de Salazar, María Alfonsa que heredó la casa de Ormaza y de Gonzalo Gómez de Butrón y Múgica, que contrajo matrimonio con Teresa Luisa de Leguizamón y Mondragón, hija de Luis de Leguizamón, IV Patrón de Begoña, y de María Ochoa de Mondragón.
- Gómez González de Butrón y Múgica, VII señor de la casa de Butrón, fortalezas de Zaballa, Abadiano y Ochandiano, y del Valle de Aramayona. Fue comendador de Mora en la Orden de Santiago. En las guerras banderizas del País Vasco fue cabeza del bando oñacino, enemigo de Pedro de Avendaño, señor de la Villa Real y Urquizo a quien el bando gamboíno tenía por su Pariente Mayor. Fue muerto en batalla el año 1448 durante el incendio de Mondragón. Contrajo matrimonio con Elvira Sánchez de Leyva, tataranieta por línea materna del rey de Castilla y León Alfonso XI el Justiciero. De éste matrimonio nacieron cuatro hijos, entre los cuales se encuentran: Juan Alonso, VIII señor de la casa de Butrón, Gonzalo Gómez, Ochoa Gómez y Juana Ibáñez de Butrón y Múgica que contrajo matrimonio el 18 de enero de 1450 con Martín Ruiz de Gamboa, señor de la casa de Olaso, patrón de los monasterios de San Bartolomé de Olaso, San Andrés de Éibar, Santa Maria de Plasencia, San Martín de Zallurroa y Santa María de Goyaz.
LINAJE SALAZAR.
La cuna del linaje en Vizcaya fue el Castillo de Muñatones, en Muskiz (Vizcaya). Participaron en las Guerras de bandos del lado Oñacino. Tuvieron casas en Somorrostro, Gordejuela, Orduña, San Salvador del Valle, Bilbao y en Portugalete.
Castillo de Muñatones. Hecho por Juan López de Salazar en 1339.
El poderoso linaje de los Muñatones fue el primero que habitó estos terrenos. Procedían de la cercana localidad de Galdames, también en las Encartaciones vizcaínas. Cuando se presentan en Muskiz, ya cuentan con ciertas propiedades que aumentarán gracias a una hábil política matrimonial. En el primer tercio del siglo XIV, los Muñatones dominan ya todo Somorrostro, Galdames y parte de Sopuerta.
Los Muñatones tenían peleas con los Marroquín, y por ello estratégicamente se unieron a los Salazar y con la dote del solar de San Martín hicieron el castillo de la fotografía. Con ese solar, y con ese castillo controlaban la exportación del hierro a toda la zona vasca.
Posteriormente, con el matrimonio de otra hija señora de Muñatones, consiguen San Martín y el control de toda la margen izquierda de Vizcaya.
LOPE GARCÍA DE SALAZAR. PARIENTE MAYOR DEL BANDO OÑACINO.
Uno de los más fuertes hombres de este linaje fue Lope García de Salazar (Musques, 1399-Portugalete, 1476) banderizo e historiador vizcaíno, autor de Las Bienandanzas e Fortunas, un documento valioso e histórico.
Los Velasco eran muy numerosos en el reino de Castilla, con inmenso poder, estableciendo un “Estado paralelo”. En la merindad de las Encartaciones controlaban las áreas de Valmaseda, los diezmos en Zalla y el Valle de Villaverde, además de tener bajo su dominio la villa de Castro Urdiales. Los Velasco y los Salazar trataban de expandir su influencia sobre las mismas zonas, enfrentándose irremediablemente en verdaderas batallas. Los Velasco colindaban con las torres de los Salazar en las áreas de Ciérvana, Galdames, Atxuriaga y Zubiate.Los Ayala eran otro de los enemigos potenciales de los Salazar, a pesar de ser la punta de lanza, junto a Salazar, del bando Oñacino. Tenían muy buenas relaciones con los Velasco, que les enfrentaba en cierta medida con los Salazar por el control del bando. Sus dominios en las Encartaciones se extendían por el curso del río Cadagua, el Nervión-Ibaizabal, y por Baracaldo, Arrigorriaga y Ayala. La familia de los Ayala estaba en plena expansión por las tierras alavesas y guipuzcoanas al no poder extenderse hacia occidente, donde se encontraban los Salazar y los Velasco. Los Ayala se enfrentaron con los Salazar por el dominio de Baracaldo y el valle de Sámano (contra los Marroquines, protegidos de los Ayala). Hubo otras familias de la zona, como los Avellaneda, con una participación escasa, alejados de las áreas de conflicto y limitándose a recoger sus rentas. Lope García de Salazar disponía de un amplio mayorazgo, ya que controlaba la mayoría de la Merindad menor de Las Encartaciones, exceptuando los valles de Galdames y Salcedo y, como ya hemos dicho, con ansias expansionistas hacia las villas de Castro y Baracaldo.
El mayorazgo personal de Lope García eran sus torres de San Martín de Muñatones (Musques), Santelices (Musques), la Sierra y Salazar (Portugalete); las ferrerías y molinos de “los vados” y Achuriaga, la ferrería del Pobal y del Arenao y las aceñas de la Puente y Fresnedo. Además de dichos beneficios, cobraba rentas adicionales provenientes del tráfico del mineral de hierro (70.000 maravedíes anuales), el prebostazgo de la villa de Portugalete y los peajes de los puertos de San Martín (ya desaparecido) y Portugalete. También se beneficiaba de la corona, cobrando el servicio de armas prestado en más de una ocasión, como en 1447, cuando percibió aproximadamente 160.000 maravedíes. Hay datos que indican que Lope García podía disponer de unos 3000 hombres a su servicio, puesto que las familias de los Ayala y Velasco disponían verdaderamente de una fuerza militar muy superior. Sin embargo, Lope García podía desarrollar una actitud defensiva sin ningún peligro.
En 1451 se enfrentó a la autoridad del monarca castellano Juan II por el nombramiento de Juan Hurtado de Mendoza como corregidor de Vizcaya. Juan Hurtado de Mendoza ya ostentaba el cargo de corregidor de la merindad menor de las Encartaciones (junta de Avellaneda) y esto supondría una pérdida de poder para los nobles locales, subordinados en su merindad mayor y menor a un solo poder. Ese mismo año estallará la hostilidad con su hijo primogénito Juan, al otorgarle el mayorazgo al segundón Lope que morirá en la batalla de Torrellas (1462). En 1457 fue desterrado durante tres años por orden del rey Enrique IV junto con otros parientes mayores de Vizcaya y Guipúzcoa por oponerse al nuevo orden jurisdiccional de mayor poder otorgado a los concejos. A causa de esto son exiliados a Jimena de la Frontera, de donde regresó al enfermar de fiebres.
Las hermandades y el corregidor de Vizcaya le acusaron de desacato a su autoridad, pero finalmente en 1460 el rey perdonó a los exiliados y les permitió regresar a sus feudos. Tras la muerte de su hijo Lope en la batalla de Torrellas, Juan, su primogénito, le reclamó su derecho sucesorio, pero fue relegado una vez más a un segundo plano, al conceder Lope García de Salazar el mayorazgo al hijo del fallecido, Ochoa de Salazar. La esposa de Lope García, Juana de Butrón, se detractó de la concesión de mayorazgo e intentó que se lo concediesen al primogénito. Otros tres de sus hijos murieron en 1468 en la batalla de Elorrio.
Estos conflictos y las continuas infidelidades de Lope García provocaron que Juana de Butrón abandonase San Martín de Muñatones en 1469, otorgando la parte del mayorazgo que le pertenecía al primogénito Juan de Salazar. Se desencadenaron entonces los acontecimientos que llevarían a la decadencia de Lope García de Salazar, llegando a solicitar ayuda a su gran enemigo, Pedro de Velasco. Esta acción de cobardía, junto a la decisión de apoyar a los Haro (Gamboínos) en su lucha contra la facción de los oñacinos (a la que pertenecía Salazar), hizo que los salazariegos tomaran a su hijo Juan de Salazar "El Moro" como pariente Mayor. En julio de 1470 sitió a su padre en su casa-torre de San Martín de Muñatones. Lope García fue recluido en esta casa fuerte donde escribiría su obra "Historia de las buenas andanças e fortunas" por la que fue conocido y por algunos proclamado como el primer historiador de Vizcaya. Ante los intentos de fuga, fue enviado a la torre de Salazar en Portugalete, donde morirá envenenado con hierbas en la comida junto con su hija bastarda Mencía de Avellaneda.
Los de Butrón contra los de Zamudio; los de Zamudio contra los de Leguizamón; los de Legizamón contra los Zariaga y Mariartu.
LINAJE DE MARTIARTU.
Anteriormente al edificio construido en piedra, parece ser que hubo primeramente otro hecho de madera que pudo haber sido destruido en los enfrentamientos banderizos. Será Martín Ortiz de Martiartu, hijo de Diego Pérez de Martiartu, apodado "El Viejo", quien construya la primeriza torre de piedra a finales del s. XIV o principios del s. XV, puesto que sabemos que Martín Ortiz muere en 1415. (1)
La construcción de esta nueva torre de piedra, de la que se conservan los muros correspondientes a las dos primeras plantas de la fachada sur y la mitad de los orientados a este y oeste, conllevaba consigo una cierta ventaja militar sobre otras familias, así como el ostentar cierto poder económico y social, lo que suponía un mayor peso político dentro del sistema feudal de la zona.
LINAJE ASÚA.Respecto al linaje del que toma nombre la torre, cabe destacar que en la obra de Lope García de Salazar, "Bienandanzas y fortunas", se señala que el linaje de los Asua, tal vez el más importante en el Erandio medieval después del Martiartu (ambos linajes emparentados), procede de Doña Juana de Zamudio. Esta obra, "Bienandanzas y fortunas" es especialmente importante para saber las causas y valores de los enfrentamientos de los banderizos en esta época, y es en ella donde más información hay sobre el linaje de los Asua.
De este modo, sabemos que quien mandó construir la casa torre fue Juan Sánchez de Asua, de forma estratégica, puesto que parece ser que se dedicaba a negocios de comercio marítimo.