jueves, 28 de octubre de 2021
CAMBIO CLIMÁTICO.
domingo, 24 de octubre de 2021
HISTORIA CRONOLÓGICA DE NOIA.
Después del mandato del Imperio romano, los suevos, llegados del norte, le pusieron fin. En el siglo VI, el obispo San Martín de Braga creó las parroquias en los antiguos asentamientos romanos. Y a cada parroquia le pone un santo a adorar. Así, desde el siglo VI, nace el culto a San Bartolomé, que hoy es el patrón del pueblo, y del que se le rinde homenaje en las fiestas de verano.
Los bretones también vinieron a Noya para saquearla, arrasaron iglesias y raptaron a muchos jóvenes. En 1115 los piratas se instalaron durante seis meses en la Creba (pequeña isla que se encuentra en medio de la ría y desde la que se podía atacar y protegerse bien) y arrasaron durante ese periodo la comarca. Para evitar los saqueos, el rey Fernando II dispone que la villa sea emplazada más adentro de la ría, donde se juntan los ríos Tambre, Tállara y Traba. De este modo, el 9 de abril de 1168 se ubicó actual villa de Noya (antes estaba más al norte).
Su posición favorable hizo que en 1168 Fernando II mandase al arzobispo erigir un puerto, eximiendo a los vecinos de “peazgo” en aras de estimular su desarrollo económico, y concediendo a la Mitra la mitad de los derechos de entrada que pagaban las mercancías extranjeras.
Durante el reinado de Alfonso X, su almirante, don Alonso Montemolín, aparece como el principal señor de los contornos de la villa.
Mientras, la fama de Santiago crecía en todo el mundo. Gente de todo el mundo peregrinaba al campo santo. El pueblo de Noya también participaba por su proximidad con Santiago y hacía de "puerto de Compostela". A principios del siglo XIV Rui Soga de Lobeira es señor de Noya y vive en el castillo del Tapal (frente a San Martín). Ayudaron al arzobispo Fr. Berengelde en la lucha que éste tenía con los burgueses compostelanos y Soga le premió con una muralla de piedra de 6 m de alto y con una iglesia extramuros, la iglesia de Santa María a Nova. En su cementerio se entierran los gremios de artesanos muertos. Se creó un hospital para enfermos y peregrinos y un lazareto para los enfermos de lepra. En esos años Noya era un muy importante pueblo comerciante.
Los chucharracos decapitaron a Rui Soga por darle su ayuda a Berenguele. A mediados del siglo XIV los primeros irmandiños quemaron la fortaleza del Tapal. Detuvieron al arzobispo Fonseca II y lo encerraron en una jaula de hierro, colgada en la plaza.
Ruy Soga de Lobeira, segundo de este nombre, llamado el Degollado, figura en documentos de 1385; fue dueño de la casa solar de Lobeira; de cuatro villas amuralladas y de nueve castillos roqueros. Era enemigo mortal de los Churruchaos. Dueño de las casas fuertes de Salceda y Oliveiros, así como del coto de Ons. Afirma que el conjunto de su Casa constaba de nueve castillos y cinco villas, que probablemente eran Muxía, Fisterra, Malpica, Muros y Noya. Dueño del Tapal, en esta última ante cuyos muros murió ajusticiado en el segundo tercio de siglo XIV. Su testamento se encuentra en el tumbo de Toxos Outos. Don Berenguel de Landoira o Landora (1317-1330), en el arzobispado de Santiago, le había hecho pertiguero mayor de Santiago y jefe mayor de todos sus caballeros.
En 1484 se confirmaban los privilegios concedidos a los mareantes de Noia, Pontevedra y Arousa, por los que, entre otras cuestiones, en caso de traición debían ser juzgados como hidalgos.
En el año 1557, habría una población en Noya de 414 vecinos. Sobre 1571 habría unos 500 vecinos. Unos 2.500 habitantes.
La trayectoria seguida por Noia y su jurisdicción sería bastante diferente. Esta estaba comprendida en el momento de la desmembración por 31 feligresías, además de la propia villa: Argalo, Artes, Baroña, Boa, Caamaño, Camboño, Carreira, Corenza, Cures, Fruime, Goiáns, Lesende, Lousame, Miñortos, Muro, Nebra, Noal, Obre, Olveira, Oleiros, Palmeira, Posmarcos, Queiruga, Ribeira, Roo, Toxos Outos, Tállara, Vilacoba y Xuño. Se excluía Ribasieira, por no haberse podido averiguar y porque en el XVIII pertenece al juzgado de Rianxo.
Quizás para 1585, había unos 600 vecinos. Unos 3.000 habitantes. Otras fuentes, a creerse exageradas, dicen que unos 800 o 900 vecinos, que serían de 4.000 a 4.500 habitantes. Aquí se vende el señorío de Noya al genovés Baltasar Lomelín.
En 1594, descendería hasta los 461 vecinos, puesto que según algunos, antes de 1585, la villa era rica pero desde que fue vendida al genovés ahora es pobre. En estos años hubo un brote de peste que según algunos en 1598 murieron más de 1.000 personas. Solo unas 25 personas, tendrían fortuna económica como para aguantar.
"En 1588 la situación se repite y el prelado debe recurrir de nuevo a la Real Audiencia. Son por entonces regidores en la villa García Prego Noguerol, Juan Méndez Andrade, Francisco Bermúdez Castro y Rui Díaz Teixeiro. En mayo de 1591, Gregorio Valladares Figueroa recibe de nuevo el título de alcalde mayor de Noia. En 1594 el regimiento de la villa se resistía a dar posesión a Hernán Sánchez Mata como juez de residencia nombrado por Hector Picamilio. Eran regidores por aquel entonces Pedro Díaz Teixeiro, Francisco Bermúdez de Castro, Jácome Alonso de Luna, Francisco Romero Acosta y Pedro Álvarez Basanta. La residencia afectaba al juez saliente Gregorio Valladares que contaba con un fuerte respaldo entre las élites de la villa. El juez de residencia debió recurrir a la Real Audiencia hasta conseguir que el 6 de noviembre le diesen posesión, con la oposición del procurador general, Alonso Santo Isidro. La averiguación, que constó de 24 preguntas practicadas a los mayordomos pedáneos de la jurisdicción, puso en evidencia los múltiples abusos cometidos por Gregorio Valladares". (Señoríos costeros y villas portuarias en la Galicia del siglo XVIII: Corcubión, Muros y Noia. Por Rodrigo Pousa Diéguez. 2019, Tesis doctoral. Universidad de Vigo).
Sobre 1570 a 1600, las personas acaudaladas de Noia eran las siguientes:
Alberte de Caamaño, Tratante de paños y sedas y otras cosas.
Gil da Nos, el Viejo, lo mismo.
Domingo Xiance, mercader.
Pedro Fernández de Neyra, Tratante de paños y vinos.
Juan Fernández Joeiro, Tratante de paños, sedas y vinos y otros.
Pedro Fernández de Vendimon, Tratante de vinos y otros.
Juan Coquejo, tienda de sedas.
Juan de Vilar, Tratante de pescados y vinos.
Jacome de Santiago, Tratante de vinos, sardinas, cáñamos y más.
Marcote, el Viejo, cáñamo, vinos y sardinas.
Juan Núñez de Paz, paños y vinos.
Francisco de Caamaño.
Álvaro García.
Alonso Zaratán.
Fernandal.
Gómez Trigo.
Manuel Pita.
Antonio Álvarez.
Johan Fernández de Luarca, mercader de vino, cáñamo, hierro y brea.
Pero García, su hijo.
Antonio Marzoa, su hermano.
Álvaro de Sotomayor.
Arias Romero de Caamaño.
Alonso Rodríguez Torrado.
Fernando Álvarez de Caamaño.
Jorge Vázquez de Acosta.
Ruy Pérez.
Rodrigo Marcote.
Martín de Leys.
Francisco Bermúdez.
Ruy Díaz.
Fernán Romero.
Doña Sancha Oanes de Sotomayor.
Doña Mayor Trigo.
Otros vecinos afortunados de otros lugares como Porto do Son:
Bartolomé de Laranga, Alberto de Porto, Yácome de Yanes, y Juan de Debe que tenían barcos y trataban de pan, aceite y vino y pasaban bien la vida.
Otras personas que coincidieron en vivir en esa época o centuria desde el 1500 al 1600:
Ageitos, Diego
Ageitos, Juan, hijo de Diego de Ageitos
Aguiar, Alonso-Sangrador
Albariza, Lopo-Labrador
Alfonso de Outeriro, Juan-Labrador
Alfonso, Ares-Notario
Alfonso, Bastián-Mercader
Alonso de Caamaño, Fernando, esposo de María Sánchez Varela
Alonso de Ron, Juan-Mercader
Altonzas, Martín-Labrador
Álvarez de Sotomayor, Diego
Álvarez, Pedro
Alvértez, Pedro-Notario y mercader
Alvértez, Teresa, esposa de Juan de Alvite
Alvite, Jácome-Armero
Alvite, Juan, esposo de Teresa Alvértez
Aragande, Alonso-Labrador
Avillés, Diego-Mareante
Avillés, Domingo-Mareante
Avillés, Juan-Mareante
Bandín, Fernando-Mareante
Barral, Rodrigo-Mareante
Becerra, Alberto-Mareante
Becerra, Francisco-Excusador
Beijón, Fernando-Labrador
Beiro, Antón-Labrador
Beiro, Gabriel-Labrador
Bermo, Gómez-Mareante
Berrimes, Fernando
Bexeres, Fernando-Labrador
Blanco, Juan-Cantero
Blanco, Juan-Mercader
Borrajeiros, Juan-Zapatero
Bravo, Gregorio-Zapatero
Brión, Francisco-Labrador
Burgos, Bartolomé
Caamaño, Alonso-Mareante
Caamaño, Álvaro-Labrador
Caamaño, Fernando-Mercader
Cairo, Gregorio-Labrador
Calrín, Juan-Labrador
Camaño, Alverte (Rico)Mercader.
Camaño, Francisco Mercader(Rico)
Camiña, Gregorio-Zapatero
Cancelas, Juan-Escribano
Cangas, Juan-Mareante
Carballido, Pedro-Sastre, esposo de Beatriz González
Careta, Gonzalo-Notario
Carou, Bertolo-Labrador
Carou, María-esposa de Domingo Fernández
Carou, Pedro-Labrador
Carou, Pedro-Mareante
Carpintero, Juan-Mareante
Casal, Fernán-Labrador
Castelán, Álvaro-Mareante
Castro, Gregorio-Labrador
Cecido, Alfonso-Labrador
Cespón, Esteban-Labrador
Chalrrín, Alfonso-Zapatero
Conde, Martín-Mareante
Corsón, Vasco-Labrador
Coscónez Lamas, Bachiller Lope-(Juez de Muros), Alcalde Mayor.
Cotoziño, Juan-Zapatero
Couceiro, Álvaro-Mareante
Crespo, Alfonso-Mareante
Cuns, Pedro-Labrador
Cuqueiro, Nicolás-Mareante
Curral, Alberto,Labrador
da Cova, Juan
da Pena, Bartolomé-Sastre
Danos, el Mozo, Gil-Labrador
Danos, Gil-Mercader
Davilés, Juan-Mareante
Domayo, AlfonsoLabrador
Domínguez, Alonso-Tabernero
Domínguez, Juan-Zapatero
Dorta, Juan-Labrador
Dos Baños, María, esposa de Francisco Gómez
Durán, Diego-Clérigo
Fagía, Juan-Labrador
Falaco de Mogor, Juan-Labrador
Falcón, Alonso-Mareante
Fariño de Lamas, Vasco, noble, esposo de Violante Varela
Faxiño, Juan-Labrador
Fernández Calvo, Pedro-Mareante
Fernández de Abeixon, Domingo-Mercader
Fernández de Berrimes, Martín, padre de Fernando Berrimes
Fernández de Luarca, Juan-Mareante
Fernández de Neira, Pedro (Rico)Mercader
Fernández de Salvatierra, Juan-Cavador
Fernández de Vendimon, Pedro (Rico)Mercader.
Fernández de Vialo, Gonzalo-Notario
Fernández Joeiro, Juan (Rico)Mercader.
Fernández Rañón, Roi-Mareante
Fernández Tato, Domingo-Mareante
Fernández, Cristóbal-Mareante
Fernández, Domingo-Pedrero
Fernández, Francisco (Rico)Mercader.
Fernández, Jorge-barquero
Fernández, Juan-Mercader
Fernández, Leonor-esposa de Gonzalo Neto
Fernández, María
Fernández, Rodrigo-Mercader
Ferreira, Ares-Labrador
Figueira, Gregorio-Labrador
Forján, Alonso-Labrador
Franco, Domingo-Labrador
Freiré, Rodrigo-Santiago de Compostela
Freiré,Pedro-Racionero
García Carreño, Fernando-Mareante
García de Cambados, Juan
García, Alonso-Mercader
García, Álvaro-Mercader
García, Fernán-Mareante
García, Gonzalo-Mareante
García, Gregorio-Mareante
García, Pero (Rico)Mercader.
Gómez de Bandín, Álvaro
Gómez de Tállara, Juan-Labrador
Gómez, Alfonso-Mareante
Gómez, Cristóbal-Notario
Gómez, Francisco-Zapatero
Gómez, Francisco-Zapatero, esposo de María dos Baños
Gómez, Miguel
Gómez, Rodrigo-Mareante
González da Costa, Fernán, Alcalde ordinario
González da Costa, García, nieto de María González
González de Torre, Antonio-Notario
González do Obre, Juan, padre de Juan González
González, Beatriz, esposa de Pedro Carballido
González, Gabriel-Mareante
González, Juan, hijo de Juan González do Obre
González, María, viuda de Maestre Alonso
González, Pedro-Zapatero
Graíno de Lamas y Señoráns, Pedro, noble, hijo de Álvaro Núñez de Lamas
Graíno, Álvaro-Mercader
Iglesia, Juan-Labrador
Lagrelas, Alberto
Lamas, Alberto-Labrador
Lamas, Gabriel-Mareante
Lamas, García-Mareante
Lamas, Martín-Notario
Leis, Bertolo-Labrador
Leis, Juan-Labrador
Leis, Vasco-Mareante
Lojo, Jácome-Labrador
López, Benito-Notario
Lorenzo, Juan-Labrador
Maneiro, Bartolo, hijo de Juan Maneiro-De Boiro-Labrador
Maneiro, Catalina, hija de Juan Maneiro
Maneiro, Juan, padre de Catalina Maneiro y Bartolo
Maneiro, Nuno-Labrador
Marcote, Antonio (Rico)
Marcote, Juan-Labrador
Mariño, Melchor-Notario
Mariño, Rodrigo-Labrador
Martínez de Ugarte, Juan
Martiz, Alberto-Labrador
Mateo, Pedro-Mareante
Méndez, Pedro-Mareante
Miguens, Fernando-Labrador
Míguez, Alfonso-Labrador
Míguez, Jácome-Labrador
Míguez, Juan-Labrador
Mirón, Juan-esposo de María Paris
Moniz, Martín
Moniz, Mayor
Montáos, Alonso-Mareante
Monte, Juan-Labrador
Montemoíno, Francisco-Labrador
Moraña, Antonio
Moraña, Antonio-Mercader
Neto, Cristóbal-Mercader
Neto, Fernando-Mercader
Neto, Gonzalo-Tundidor
Noal, Pedro-Labrador
Nobo, Pedro-Labrador
Núñez de Lamas, Álvaro, noble, padre de Pedro Graíno de Lamas
Núñez de Paz, Juan-Rico-Mercader
Núñez, Alfonso-Labrador
Núñez, Jácome -Labrador
Otero, Juan-Mareante
Outeiro, Alfonso-Labrador
Outeiro, García-Mareante
Outeiro, Juan-Labrador
Outón, Antonio-Labrador
Outón, Juan- Procurador de Causas
Padreda, Bartolomé
Pais, Francisco-Mercader
Pais, Vasco-Labrador
Pardal, Rodrigo- Mercader
Paris, María
Paris, Martín
Pastoriza, Alberto-Labrador
Patiño, Juan-Mercader, cuñado de Tomás Vinagre
Patiño, Pedro-Mercader
Paz, Alonso-Procurador General
Paz, Luis-Mercader, Mareante
Pazos, Juan-Mareante
Pena, Gregorio-Mercader
Penela, Bartolomé-Mareante, yerno de Juan de Otero
Pereira, Bartolomeu-Zapatero
Pereira, Juan-Mareante
Péres, Mencía
Pérez de Eiroa, Gregorio-Labrador
Pérez de Pastoriza, Juan-Labrador
Pérez de Sofán, Juan
Pérez Mariño, Gonzalo- SEÑOR DEL COTO DE CAAMAÑO Y CASA DE NEBRA
Pérez Ruso, Juan-Labrador
Pérez Tomé, Juan-Labrador
Pérez, Alberte-Mareante
Pérez, Baltasar-Zapatero
Pérez, Domingo- Mareante
Pérez, Gaspar-Zapatero
Pérez, Roi-Mareante
Pillado, Diego-Mercader
Porto, Antón-Mareante
Portugés, Alfonso-Labrador
Prego de Montaos, Juan-Regidor
Prego, Vasco
Puñal, Alfonso-Labrador
Queiro, Alberto-Labrador
Quintáns, Alfonso
Raíces, Juan-Labrador
Raposo, Lope
Reboredo, Gregorio-Labrador
Reiriz, Bastián-Labrador
Ribadeo, Pedro-Mareante
Ro, Juan-Labrador
Ro, Rodrigo
Rodas, Lois-Mercader
Rodeiro, Fernando-Zapatero
Rodríguez de Caamaño, García
Rodríguez de Leis, Fernán-Suegro de Juan Cancelas
Rodríguez Marcote, Antonio
Rodríguez Polín, Juan-Notario
Rodríguez Torrado, Alonso-Alcalde ordinario
Rodríguez, Blas-Labrador
Rodríguez, Miguel-Notario
Rodríguez, Pedro-Labrador
Romeu do Souto, Juan, marido de Mayor do Souto
Romeu, Lopo-Labrador
Saltón, Alonso, marido de Mayor Moniz
San Lorenzo, Pedro-Criado
San Payo, Martiño-Labrador
Sánchez de Lanzós, Pedro, Teniente de Gobernador
Sánchez Varela, María, esposa de Fernando Alonso de Caamaño
Sánchez, Bastián-Mareante
Sánchez, Pedro-Mareante
Santiago, Alberte-Mareante
Santiago, Gonzalo
Santiago, Jácome (Rico)Mercader.
Santos, Juan-Labrador
Seilán, Pedro-Labrador
Sende, Juan-de Camboño
Seoane, Alberto-Labrador
Seoane, Fernán-Santiago de Compostela
Sidráns, Greogorio-Zapatero
Sobrado, Gonzalo-Mercader
Soga, Gregorio-Labrador
Souto, Mayor-Viuda de Juan Romeu do Souto
Suárez, Juan-Notario
Teixo, Alonso-Mercader
Tobío de Belles, Fernán
Tobío, Juan, hijo de Lorenzo Tobío
Tobío, Lorenzo-Labrador, padre de Juan Tobío
Torre, Juan-Labrador
Traba, Jácom-Mercader
Trasmonte, Pedro-Labrador
Trigo, Gómez (Rico)Mercader
Trigo, Juan-Mareante
Valladares Figueroa, Gregorio- Alcalde Mayor
Varela de Villamide, Gil-Teniente de Gobernador
Varela, Violante, esposa de Vasco Fariña de Lamas
Vázquez do Campo, Juan
Vázquez, Francisco, Licenciado en Medicina
Vázquez, Gregorio-Zapatero
Vázquez, Pedro-Zapatero
Vicente, Domingo-Labrador
Vidal, Fernán-Labrador
Vilaboa, Martín-Labrador
Vilar, Juan (Rico)Mercader, Mareante
Vinagre, Tomás-Cuñado de Juan Patiño
Viñas, Juan-Mercader
Vivaldo, Agustín-Factor de Lomelín
Xiance, Domingo (Rico).Mercader
Yanes, Fernán-Mareante
Durante 1597 a 1599 el haber soldados por la guerra contra Inglaterra hace que se destruyan casas y cosechas pues estos al pedir y a veces no querer darles por no tener, roban y destruyen.
A principios del 1600, exactamente sobre 1610, durante la visita del Visitador Compostelano, canónigo D. Jerónimo del Hoyo, existía una población de 400 vecinos.
Como las anteriores, Noia funcionó desde muy pronto como cabeza de un gran señorío, constituido en origen por 28 feligresías que incluían al monasterio de Toxos Outos y su dominio hasta principios del siglo XVII: Argalo, Artes, Baroña, Barro, Boa, Caamaño, Camboño, Carreira, Corenza, Fruime, Goiáns, Lesende, Lousame, Miñortos, Muro, Nebra, Noal, la propia Noia, Obre, Oleiros, Olveira, Palmeira, Queiruga, Riveira, Roo, Tállara, Toxos Outos y Vilacova. Todas ellas formaban parte del antiguo juzgado de Posmarcos, que en la Edad Moderna cambiará su nombre por el de su capital, perdurando tan solo en la división eclesiástica y el concejo rural. Posteriormente quedaba reducida a 24, tras la venta de la jurisdicción de Toxos Outos a Sobrado.
La villa y su jurisdicción fueron objeto de las desmembraciones eclesiásticas hechas por Felipe II, de manera que pasaría por las manos de varios señores y administradores hasta regresar al arzobispo un tanto menguada. Formaría parte del señorío del genovés Hector Picamelio y sus sucesores al menos hasta 1612. Entre 1627 y 1632, la villa y su jurisdicción pertenecieron al basto señorío de los condes de Lemos, que recientemente habían sido despojados de las jurisdicciones del Estado de Ulloa tras el pleito secular con los Monterrey. Su origen medieval hará que cuente con el casco urbano más desarrollado de los estudiados. A mediados del XVIII contaba con 510 casas, el ayuntamiento, el pazo episcopal, dos iglesias y varias casas paciegas de la hidalguía urbana. La Casa Malvar, el Pazo dos Acosta, la Casa da Xouba y el Pazo do Forno do Rato son algunos ejemplos.
En 1634, don Vasco Romero Sotomayor —regidor de Noia.
El portugués Rodrigo Méndez Silva publica en el año de 1645 en su obra Población General de España que habría unos 600 vecinos.
"La villa de Noia presenta una estructura social y profesional bastante diferente a las demás, en relación directa con sus orígenes antiguos como el principal puerto de la ría durante la Edad Media. Empleando de nuevo el Catastro de Ensenada para tener una visión de conjunto a mediados del siglo XVIII, se puede observar que, mientras en Corcubión y Muros, el número de nobles es casi irrelevante, Noia es centro de arraigo de numerosos linajes desde la Baja Edad Media, incluso ya en el siglo XVIII, presenta una economía en decadencia; los oficios urbanos siguen atrayendo a linajes hidalgos, cuyo arraigo se consolida mediante el enlace matrimonial con las familias nobles de la villa, como los Boán de Ourense, o los Lira Colvell Pontevedreses. De los 480 vecinos, el 10% pertenecen al estamento eclesiástico (18 clérigos y 31 regulares franciscanos). Como en Muros, la cifra de pobres de solemnidad resulta exagerada, ya que englobaría al 21% de los hogares; pero como allí la pérdida del libro de personal y el de real impide su comprobación".(Señoríos costeros y villas portuarias en la Galicia del siglo XVIII: Corcubión, Muros y Noia. Por Rodrigo Pousa Diéguez. 2019, Tesis doctoral. Universidad de Vigo).
Las regidurías de Noia atrajeron a sujetos de lugares distantes deseosos de hacerse con un oficio en el regimiento. Ya en el siglo XVI, don Pedro Vera Moscoso lo hará desde Pontevedra y en el XVIII nos encontramos en la villa con la familia orensana de los Boán.
En 1679 llegan a Noia los Zúñiga Ramírez Arellano, que se perpetuarán en el regimiento hasta el XVIII. Don Benito Lira Colvel Quirós, que casaría con una hija de don Benito Zúñiga Ramírez, era vecino de Teis y heredaría la regiduría de su suegro a su muerte. Pese a ello buena parte de los particulares y linajes que ejercerían el oficio estaban afincados en Noia, una villa con abolengo, en la que —a tenor de los libros sacramentales— un buen número de hidalgos tenían su residencia. Es el caso de don Vasco Romero Sotomayor (1627-1644), don Antonio González Romay, don Fernando Mendoza, don Fernando Quiroga Losada, don Benito Zúñiga Arellano, don Ignacio Jove Vega o don Alberto Torrado.
Los oficios atrajeron también a individuos de las parroquias cercanas, como don José Taboada y su hijo don Miguel Añón, vecino de Boel en Outes, don José Gómez de Obre, también de los Noguerol, que acceden por primera vez a un cargo en el regimiento a mediados del XVII. Es el caso de don Fernando Noguerol, vecino de Argalo, que el 1 de noviembre recibía el oficio de su cuñado don Juan Mendoza Sotomayor, casado con su hermana doña Mayor Noguerol. Aunque algunos, como los Boán, trasladaron su residencia a la villa, en otros casos se incumplió con la obligación de la residencia. Es el caso de los Vera Moscoso. Don Antonio Vera Moscoso, de Pontevedra, accede al oficio en el siglo XVI y lo ejerce hasta 1646, cuando pasa a su hijo don Pedro Vera Moscoso, también vecino de Pontevedra. Don Fernando Andrade le concedía el nombramiento el 5 de julio de 1646 y el día 20 tomaba posesión. Ninguno traslada su residencia a la villa y muestra de su desinterés es la renuncia tres años después del oficio, hecha en Pontevedra el 12 de enero de 1669, a favor de don Pedro Caamaño Sotomayor, vecino de Noia. Frente a lo que sucedía en Corcubión o Muros, el regimiento de Noia está compuesto en su totalidad por nobles, al menos desde el siglo XVII. Estos no se encuentran directamente vinculados a actividades comerciales ni pesqueras; se trata, por tanto, de meros rentistas que encontraron en los oficios municipales un galardón más con el que adornar su condición. Además, pasado el siglo XVI, el regimiento parece cerrado en sus filas a la incorporación de advenedizos que no compartan la condición hidalga con el resto de capitulares. Por ello, a mediados del siglo XVIII todos sus miembros, incluido el procurador general, se opondrán a la incorporación al consistorio de Juan Barreiro, al que además en sus múltiples escritos dirigidos al arzobispo niegan el tratamiento de don.
Este vecino de Santiago de Tal era hijo de un zapatero y su único lazo con la hidalguía provinciana era su esposa. Las numerosas cartas de los consistoriales, obligaron al arzobispo finalmente a ceder, negando al aspirante la preciada regiduría.
Así la mayoría de los regidores eran propietarios de pazos, que encabezan sus dominios solariegos: la familia de los Varela Ulloa, de la Casa de Bergondo, los Caamaño Sotomayor, de la Casa de Nebra y coto de Anllóns, los Boán de la Casa de San Damián y coto de Fuentefría, los Luaces de las Casas de San José de Broño.
En cuanto a otras características socio-profesionales, fueron numerosos los capitanes de infantería y milicias a cargo de los regimientos provinciales que accedieron al cargo: como José Cuervo Quirós, Diego Losada, Pedro Prego Noguerol, Paio Lamas Sotomayor, Vasco Romero Sotomayor, García Caamaño Sotomayor, Juan Ponte, Benito Lira y Juan Varela Ulloa. Don Antonio Valdivieso era teniente coronel del regimiento de milicias de Compostela1069. En cuanto a su formación, hasta el siglo XVIII ninguno manifiesta mayor formación que la de licenciado y bachiller; es el caso del bachiller Alonso Pérez Luna (1586-1588) y el licenciado Reino (1551-1578). Ya en el ochocientos encontramos algunos abogados, como don Manuel Añón, hijo de don José Taboada, también a don Carlos José Barreiro, abogado de la Real Audiencia, que recibía la renuncia de don Luis de la Concha, enfermo de “hidropresía” en 1781, por ser sus hijos menores. A finales de siglo accede don Felipe Antonio Cambeiro, abogado de Consejos, que sucede a don José Dios Concha, aunque sin renuncia. Este individuo ya había sido diputado de abasto y alcalde en la villa y para la concesión del oficio contó con el apoyo de otros capitulares: los regidores don Reino Lanzós, Alberto Torrado y José Lira, que escribieron al arzobispo.
También documentamos a dos vinculados al Santo Oficio, como don Vicente Valderrama Aguiar, tesorero del Santo Oficio, y don Francisco Lago, depositario de pruebas de los pretendientes al tribunal de la Inquisición. El hermano de don Diego Quiroga Losada, don Fernando, sería Comisario del Santo Oficio además de cura de Oleiro". (Señoríos costeros y villas portuarias en la Galicia del siglo XVIII: Corcubión, Muros y Noia Rodrigo Rousa Diéguez. 2019, Tesis doctoral. Universidad de Vigo).
Regidurías:
- Prego Noguerol
- Luaces
- Quiroga Losada
- Jove
- Caamaño Sotomayor
- Varela Ulloa
- Paz Luaces
- Boán
- Campero Calderón
- La Concha
- Lamas Sotomayor
- Zuñiga
- Álvarez Mariño, Juan (1658-1709)
- García Rial, Benito (1659-1709)
- Paz Pardiñas, Juan ( -1707)
- Díaz, Simón (1697-1708)
- Rodríguez Oreiro, Marcelo (1689-1709)
- Caamaño, Domingo Antonio (1703)
- Ferraces, Domingo Antonio (1708-1725)
- San Martin, Agustín (1708-1737)
- Rial, José (1709-1722)
- García Paadín, Domingo (1710-1742)
- Henríquez, Ginés (1719-1722)
- Sanz, Juan Antonio (1722-1753)
- González, Bartolomé (1727-1766)
- Santiso, José I (1739-1756)
- García Villar, Pablo (1749)
- Santiso, José II (1756-1805)
- Villar, Juan Francisco (1766-1771)
- García Villar, Tomás (1772-1800)
- Ponte Andrade, Benito Francisco (1749-1779)
- San Martín, Andrés Jacinto (1738-1757)
- Fernández Castro, Luis (1757-1767)
- Díz Pérez, Lorenzo (1768-1799)
- Henríquez Osorio Montenegro, Ginés (1759-1779)
- Henríquez Osorio, Juan (1779-1800)
- Queiruga, Carlos
En 1708: 590 vecinos. Unos 3.000 habitantes.
En 1711: 496 vecinos.
En 1717: 365 vecinos. Unos 1.800 habitantes.
"Los fondos de la Secretaría de Marina muestran el retroceso de la actividad pesquera de Noia, que en 1758 ha quedado relegada, con solo 141 matriculados, por detrás de otros puertos de su misma jurisdicción, como Porto do Son y Palmeira, y seguida de cerca por Carreira y Ribeira, con 122 y 114, respectivamente".(Señoríos costeros y villas portuarias en la Galicia del siglo XVIII: Corcubión, Muros y Noia. Por Rodrigo Pousa Diéguez. 2019, Tesis doctoral. Universidad de Vigo).
En 1760: 415 vecinos. Unos 2.200 habitantes.
Como vemos ronda durante estos 200 años los 400 vecinos o sea unos 2.000 habitantes. Recordemos los períodos de hambre y enfermedades, como la peste bubónica que asolaron vez tras vez a la villa.
En 1857, ya tenemos , 2.537 habitantes.
1900: 3.246 habitantes.
Fuentes:
- Libro Muerte y Ritual Funerario En la Historia de Galicia, Antón A. Rodríguez Casal y Domingoi L. González Lopo, Universidad de Santiago de Compostela.
- Wikipedia.
- Libro: A Noia da Memoria, de Pedro García Vidal, 1991.
- http://www.sologenealogia.com/gen/getperson.php...
- LARRUGA BONET, E. (1798): 295.
- LARRUGA BONET, E. (1798): 301.
- Señoríos costeros y villas portuarias en la Galicia del siglo XVIII: Corcubión, Muros y Noia. Por Rodrigo Pousa Diéguez. 2019, Tesis doctoral. Universidad de Vigo.
LOS LEIVA Y ALGUNOS DE SUS ANCESTROS MÁS RESALTABLES.
Una época en la que se empezaba a expulsar a los musulmanes de el norte de España. Donde existían tierras poco pobladas e incluso yermas. La población sería de unos 4 millones de habitantes, pero en el norte sería de quizás 1 millón. Pero en estas comarcas, solo sería de miles de habitantes, dispersos por muchas aldeas desde Galicia hasta el el Reino de León.
Se nos habla de un tal Álvar García, quien era en el año 970, señor de Leiva y del que tomó como su apellido. Se ignora si pertenecía a la clase visigótica (lo más probable), o era parte de la sociedad hispanoromana que convivía con los visigodos antes de la ocupación árabe. Lo que sí sabemos es que luchó en arduas batallas con la nueva sociedad formada y fue recompensado con esta localidad.
García Fernández, conde de Castilla, era el señor a quien tenía que rendir cuentas. Ramiro III, rey de León era del que dependía el poder en esa zona.
Ramiro III, rey de León.
Quizás su nieto o biznieto, fue Sancho Martínez de Leiva, que nació sobre el año 1040.
Lugar donde se encuentra La Rioja. Dentro de él, está la localidad de Leiva.
Este, era también señor de Leiva, y se casó con doña Hermesenda Ábalos, hija de Lope López de Ábalos, vizcaíno según algunos, descendiente de RAMIRO, Rey de Navarra.
Otros le consideran como perteneciente a los orígenes de la Casa de Haro, ya que los primeros Señores de Vizcaya y Conde de Álava usaban a menudo la alcuña "de Ávalos".
El hijo de ambos fue, Martín Martínez de Leiva, señor de Leiva, éste sirvió como caballerizo mayor al rey Sancho VI de Navarra (1150-1194). Se casó con doña Teresa de Zúñiga, nieta por parte materna de Diego López de Haro, X señor de Vizcaya y por parte paterna, también, descendiente de don Garcia Sánchez III de Pamplona, Rey de Nájera-Pamplona.
Como notamos, estos Leiva, se van casando con enlaces de la más selecta nobleza castellana como linajes poderosos como los Haro.
La reina Urraca I de León (1109-1126).
Su hijo fue llamado como su abuelo, Sancho Martínez de Leiva, también señor de Leiva.
Sobre el 1130 nació su hijo, Garci Martínez de Leiva, señor de Leiva. Casó con doña Teresa Ruiz de Haro. Personaje dudoso; no documentada, pero citada, sin filiación, en varias "genealogías de Internet".
Según la fuente, era "hija del Señor de los Cameros"; con su nombre y este dato podría tratarse de una hija de RODRIGO DÍAZ, Señor de los Cameros y ALDONZA DÍAZ DE HARO, es decir, hermana de SIMÓN (f. 1277) y ALVAR RUIZ DE LOS CAMEROS, personajes bien conocidos, aunque para ello hay dificultades cronológicas.
Sirvió Garcí, al rey Sancho VII de Navarra (1194-1234), porque la casa de Leiva estaba en ese momento en su territorio, destacando especialmente, por su papel como juez en las disputas de los obispos de Burgos y Nájera, sobre Santo Domingo de la Calzada.
Alfonso VII de León, rey de León (1126-1157).
Sobre 1170 tienen a Martín Ruiz de Leiva, señor de Leiva y embajador de Granada.
El rey de León, Sancho III (1157, 1158).
Alfonso VIII, rey de Castilla (1158-1214).
Ignorándose con quien se casa, sabemos que sobre 1180 tienen a Sancho Martínez de Leiva. Casa con doña Berenguela de Montcada.
Tienen a Martín Ruiz de Leiva sobre el 1220, quien es señor de Leiva y también fue embajador a Granada (1272). Ayuda al rey a someter entre otros a los ricos hombres de Castilla y León y al infante don Felipe. Casa con mujer desconocida y tienen a Sancho Martínez de Leiva (¿1240?-1293), Ricohombre, Adelantado Mayor de Castilla, Guarda y Merino Mayor de Castilla.
Como adelantado mayor de Castilla y capitán general de Andalucía sirvió Sancho Martínez de Leiva, al rey Sancho IV el Bravo (1284-1295), lo cual le brindó la posibilidad de participar en el ataque contra Ibn Yacub, rey de marruecos, que al mando de los benimerines y apoyado por algunos granadinos y el infante don Juan, intentaron tomar de nuevo Tarifa, después que ésta había sido reconquistada en 1292, lo cual no consiguieron.
Además, se relata un curioso acontecimiento sucedido en Alfaro, según el cual, durante una conversación entre el rey, Sancho Martínez de Leiva y Gómez de Manzaneda, “…tratando con estos cavalleros en los disgustos passados…”, se realizaron ciertos comentarios entre el Conde y el infante don Juan, llegando a meter “…mano a las espadas para matar al rey…”. Ante tal percance Sancho Martínez de Leiva defendió al rey, aunque recibió una herida en la mano, y el conde murió, no queriendo luchar contra el infante don Juan por ser sobrino del rey.
Enrique I y Berenguela I reinaron desde 1214 hasta 1217.
Fernando III, rey de Castilla (1217-1252).
Retrato imaginario de Alfonso X el Sabio, rey de Castilla (1252-1284).
Alfonso X, en una miniatura medieval del Libro de los juegos.
Este, desde 1284 hasta 1292 es Merino Mayor de Castilla (rey Sancho IV), un privilegio en 1287 le confirma como merino mayor y de Guipúzcoa en 1291.
Por encargo del rey Sancho IV y como hombre de su confianza, fue como juez árbitro para resolver con el rey de Aragón, don Pedro, las diferencias que existían sobre los límites y derechos de sus respectivos reinos.
En 1287 aconseja al rey sobre el arrendamiento de las rentas que hiciera a Abraham el Barchilón.
El rey castellano Sancho IV (1284-1295).
Casa con una joven de la casa de Velasco, emparejándose con uno de los linajes castellanos más poderosos. Se le considera un ricohombre así que de seguro esta casa, iba de a poco, recibiendo grandes mercedes de los reyes. Muere en 1293.
Quizás en 1270, tienen a Juan Martínez de Leiva, señor de Leiva y Baños. Falleció en 1312, sobre los 40 años y se dice que lo mandó matar don Juan Manuel, Señor de Escalona, Elche y Peñafiel y Príncipe de Villena.
Casó con doña Juana de Avellaneda, descendiente de los señores de Vizcaya, los Haro, y tuvieron a Juan Martínez de Leiva (c. 1295-Algeciras, 1343).
TÍTULOS.
Fue señor de Leiva, Baños, Coruña y Valdescaray, Capitán de la frontera de Santarén. Ricohombre. Adelantado Mayor. Formaba parte del consejo del rey Alfonso XI. Como tal era uno de sus hombres más confiables. Uno de los 4 caballeros que ordenaron La Caballería de la Banda. Embajador al Papa Benedicto XII. merino mayor de Castilla (1326-1330, 1334, 1335), guarda (1327) y camarero mayor del rey Alfonso XI de Castilla, merino mayor de Vizcaya, prestamero mayor de Vizcaya, notario mayor de los privilegios rodados y mayordomo mayor de la infanta Leonor de Castilla, hermana de Alfonso XI y posteriormente reina consorte de Aragón por su matrimonio con el rey Alfonso IV de Aragón.
Infanta de Castilla. Reina consorte casada con Alfonso IV.
Fuente: https://dbe.rah.es/biografias/11982/leonor- de-castilla
La Orden de la Banda fue una orden militar fundada en 1332 cuando Alfonso XI de Castilla, intentando cimentar su poder sobre la levantisca nobleza, ordenó que ciertos caballeros de su mesnada vistieran como él paños blancos con una banda de tafetán carmesí que él había diseñado. Los colores fueron cambiando a lo largo de la historia. Se concedía a estos caballeros el derecho a llevar adornos de oro y plata por ser caballero de la Banda de Oro.
BIOGRAFÍA.
Quizás entró en el ámbito cortesano de la mano de los Haro o los Lara. Sus primeras referencias indican que era un infanzón y buen caballero partidario del infante Felipe cuando éste se hizo cargo de la tutoría de Alfonso XI en 1312. Además, fue alférez del infante Pedro, razón por la cual fue designado su fiador en un cambio efectuado entre éste y su hermana Blanca, abadesa del Monasterio de Santa María de Las Huelgas.
En 1326 es merino mayor de Castilla. Se supone que estaba relacionado con los Haro y los Lara porque ese año fue nombrado albacea del testamento de María Díaz de Haro I, viuda del infante Juan. Además, se le entregó el castillo de Iscar para que lo tuviera por los nietos de Diego de Haro, asunto en el que encontró las reticencias de su anterior alcaide, Ruy Pérez de la Vega. Las intrigas políticas le pusieron en más de un aprieto, pues Juan se opuso a la privanza del conde Álvaro Núñez Osorio y sufrió un intento de asesinato del que se libró por ser avisado a tiempo (1328).
A partir de entonces gozó de la confianza del Monarca, que lo nombró merino mayor de Castilla y su camarero mayor, por eso intervino en la organización de la ceremonia de entrada en vasallaje de un nutrido grupo de nobles, que sancionaron así su fidelidad al Soberano.
En 1331 traicionó al rey poniéndose de parte de Don Juan Núñez de Lara.
En 1332, año en que Alfonso XI fue coronado y en que se instituyó la Orden de la Banda en el reino de Castilla y León, Juan Núñez III de Lara y Don Juan Manuel, mostrando su desavenencia con el rey, no estuvieron presentes en las dos ceremonias, a pesar de que el rey nombró caballeros de la Orden de la Banda a los principales magnates y ricoshombres castellanos. En esa época, tanto Don Juan Manuel como Juan Núñez III de Lara, fortificaban sus posesiones y procuraban enemistar a los servidores del rey y a los miembros de su casa con el soberano, tales como Juan Martínez de Leyva, quien abandonó su cargo de Camarero mayor en la corte y pasó a ocupar el puesto de mayordomo mayor de Juan Núñez de Lara, a pesar de las rogativas de Alfonso XI. Poco después, Don Juan Manuel y Juan Núñez de Lara comenzaron a hacer la guerra al soberano castellano, Don Juan Manuel desde su castillo de Peñafiel y Juan Núñez de Lara desde la ciudad de Lerma. Por ello, el rey, que se encontraba en la ciudad de Burgos, se trasladó a la ciudad de Valladolid. Poco después, el rey se apoderaba del castillo de Avia, que había sido ocupado por los partidarios de los magnates rebeldes.
Así ocurrió, permaneciendo a las órdenes del magnate cuando éste regresó a la obediencia regia. De hecho, intervino como vasallo y mayordomo suyo en el cerco de Gibraltar (1332), aunque no tardó en retornar al servicio del Soberano, recuperando su puesto de camarero y recibiendo el de guarda mayor. Bajo sus órdenes, ayudó al aragonés Pedro de Jérica, que se había rebelado a favor de los castellanos en 1334 y en 1339 acudió como embajador regio ante la Santa Sede en Aviñón, regresando justo a tiempo para incorporarse a la hueste regia que sitiaba Tarifa, la batalla del Salado (1340) donde luchó junto a su hijo "Brazos de Hierro". No sorprende, por tanto, que obtuviera la mayordomía mayor de Castilla en 1342, aunque fue una cesión temporal, pues el noble no tardaría en fallecer.
Además de sus posesiones en Leiva y otras propiedades en Castilla la Vieja, obtuvo el señorío de Castroponce tras vendérselo Juana Fernández de Saldaña (1330), bienes raíces a los que algunos suman los señoríos de Baños, Coruña y Valdescaray. Ciertos autores dicen que casó con una dama de la casa de Avellaneda, mientras que otras referencias apuntan a que contrajo matrimonio con Juana Sánchez de Velasco y, en segundas nupcias, con una hija de don Juan Manuel, de nombre Guiomar. Es posible que sean dos personajes homónimos, quizás padre e hijo, aunque las genealogías le otorgan la paternidad de Sancho Martínez de Leiva, María y Sancha de Leiva.
*Ver nota abajo con relación a algunos antepasados interesantes de Juan Manuel de Villena.
Mis antepasados vienen de sus dos hijas, doña Mencía y doña Juana.
La primera se casó con Juan Martínez de Rojas Díaz.
Doña Juana Martínez de Leiva, casó con Gómez García de Meneses, descendiente de Tello Pérez de Meneses, I Señor de Meneses, del siglo XII.
Según SALAZAR Y CASTRO (9-302, fº 77), habría casado con TELLO GARCÍA DE MENESES y no con su hermano GÓMEZ (el cual habría casado con JUANA, hermana de esta). Cualquiera de las dos hipótesis valida las líneas ascendentes.
Fernando IV, rey de Castilla (1295-1312).
Tuvieron sobre el 1320 a Juan Martínez de Leiva, señor de Leiva y Baños (¿1320?-*Santarén, 1384). Alfonso XI le concedió la localidad. Prestó sus servicios a don Juan I de Castilla en la guerras de Portugal. Fue Capitán General y adelantado mayor de esa frontera. Él hizo una fortaleza en esa zona, sobre 1335.
Casó con doña María Díaz de Ceballos, descendiente de Don Ruy González de Ceballos Hita, Ricohombre de Castilla y de Alfonso IX, rey de León, entre otros.
*Algunos dicen que murió de peste, en Lisboa y otros que murió en 1385.
Tuvieron a Sancho de Leiva, señor de Leiva y Baños, que nació sobre 1360. Casó con doña Leonor de Guevara, del poderoso linaje castellano. Sirvió a los reyes castellanos Enrique III y Juan II.
En 1406, se hace un reparto de los vasallos de Ezcaray y su tierra (Valgañán, Zorraquín, Santurde y Pradilla) entre Sancho Martínez de Leiva, Isabel y Francisca de Meneses. Se establece la mitad para Isabel y de la otra mitad un tercio para cada uno, es decir, que la parte que le tocó a Sancho fue un sexto del total.
El monarca Juan II le da carta de merced en el año 1452 para revalidar el mayorazgo que había fundado su antecesor, Juan Martínez de Leiva, que instituyó en su hijo mayor Ladrón de Leiva.
Bisnieta por línea materna del rey de Castilla y León Alfonso XI el Justiciero. Señora del Castillo de Leiva por el matrimonio que efectuó con Sancho Martínez de Leyva, señor de las Villas de Leiva, Baños de Rioja, Yzcaray y Santurde, señores del Castillo de Leiva.
Alfonso XI, rey de Castilla (1312-1350).
Pedro I de Castilla, rey de Castilla (1350-1366).
Es descendiente directa de la casa de Borgoña y por esta línea familiar de los monarcas de los reinos de Asturias, Castilla, León, Aragón, Navarra, Portugal, la dinastía de los Capetos de Francia, la dinastía Hohenstaufen de Alemania, la casa de Plantagenet de Inglaterra, el Reino de Escocia, la casa de Normandía y la casa de Uppsala.
Enrique II, rey de Castilla (1366-1379).
Juan I, rey de Castilla (1379-1390).
Enrique III, rey de Castilla (1390-1406).
Tienen a Ladrón de Leiva, señor de Leiva y Baños (c. 1400-¿?).
La construcción del castillo se inicia, por lo tanto, en 1478 a iniciativa de Ladrón de Leiva, dura veinte años y es acabada por su hijo Juan de Leiva. De la construcción original queda todo el trazado general de los lienzos y torreones, el foso (en la actualidad colmado) y la barrera que lo protege.
Casa el 11 de febrero de 1445 con doña Inés de Herrera, su tía segunda.
Juan II, rey de Castilla (1406-1454).
Enrique IV, rey de Castilla (1454-1474).
Alfonso de Castilla, rey de Castilla (1465-1468).
Tienen a Juan Martínez de Leiva (c. 1446-1507).
Capitán General del Rosellón. Teniente General de los Ejércitos.
8º Señor de la casa y mayorazgo de Leiva y Baños. Según Gonzalo Fernández de Oviedo (BQ, I, 3, 24) "capitán de cien hombres de armas de las guardas e gente ordinaria del Estado Real de Castilla [...] varón constante e valeroso e de mucha auctoridad; e los Reyes Catholicos don Fernando e doña Isabel, que ganaron Granada, hacían mucho caso de su persona, e los sirvió muy bien en aquella santa conquista".
Antes de la toma de Granada (1492) ya había tenido papel destacado en la guerra de Portugal. Más tarde luchó en Francia, y sucedió a Enrique Enríquez y Sancho de Castilla como general del ejército en el Rosellón y la Cerdaña.
Anterior al actual castillo que conocemos hubo otro anterior, una fortaleza, que se encuentra emplazada en un término llamado “Campo de la Torre” que se hundió hacia 1478 (y cuya construcción, que se desconoce, podía datar de 1335) cuando Alfonso XI concedió la localidad a Juan Martínez de Leiva, su bisabuelo.
Nada más caerse la torre se inició la construcción del nuevo edificio. La mayoría de los testigos tienen dudas sobre si tal trabajo lo inició Ladrón de Leiva o su hijo, Juan de Leiva, porque al parecer, el primero se volvió loco o había perdido el juicio. Por esta razón, Juan de Leiva debió ejercer como señor de la casa de Leiva, antes de que muriera su padre, e incluso, antes de estar casado con Constanza de Mendoza, siendo en ese momento, hacia 1478, cuando se hundió la torre y se comenzó la construcción de la nueva fortaleza, que ya estaría terminada en lo esencial unos veinte años más tarde. El primer mayordomo que pagó las obras fue un judío llamado Jaco Abara, el cual estaba al servicio del mayorazgo de los Leiva.
A cerca de los materiales empleados, nada llega a indicarse de las canteras de las que Juan de Leiva mandó extraer la piedra necesaria, además de emplear la proveniente de la torre vieja. Sin embargo, sobre la madera se dice que se corta en Avellanosa de Rioja y Quintanar de Rioja, localidades próximas a Leiva, en el límite actual con la provincia de Burgos, teniendo un acuerdo con la segunda firmado en fecha que desconocemos, por la que se permitía cortar leña de sus montes.
En cuanto a lo relacionado con la construcción parece que ésta comenzó por la torre del homenaje, como recuerdo de la torre fuerte que se había hundido, afirmando Diego Fernández Casero que la función de ésta sería la de “…hechar alli presos a los que hiziesen mal…”. Después, sucesivamente se fueron poniendo en pie el resto de los muros y tres torres, al tiempo que se abría el foso (cuyas paredes eran revestidas de calicanto) y se levantaba una barrera, todo lo cual se terminó después de muerto Ladrón de Leiva, por su hijo Juan, cuando ya estaba casado con Constanza de Mendoza. Ambos, además de terminar la fortaleza, hicieron en ella un palomar y cambiaron “…la escalera que estava hazia la yglesia de San Myguel e mudarla hazia la dicha dehesa…”. Fue el hijo de éstos, Sancho Martínez de Leiva, al que atribuye uno de los testigos la realización de “…unos corredores…”, lo cual no es confirmado por otros. En cualquier caso, terminadas las intervenciones del último cuarto del siglo XV, la fortaleza estuvo finalizada, tanto en el exterior como en el interior.
Precisamente a éste confirmó Enrique II, el 23 de febrero de 1367, el privilegio que existía sobre la casa de Leiva, otorgado con anterioridad por Alfonso XI. Juan Martínez de Leiva sirvió al rey Juan I (1379-1390), haciendo una breve indicación acerca de sus servicios en las batallas que para conseguir el trono portugués se sucedieron, falleciendo en Santarem en 1385 “…por general de muchas gentes…”.
El 6 de diciembre de 1456, cuando todavía Ladrón de Leiva seguramente no había muerto, Enrique IV, confirmó el privilegio de la villa de Leiva, dado por Alfonso XI, pero tal confirmación se da a Juan Martínez de Leiva, hijo de su matrimonio con Inés de Herrera, quizás porque como algunos testigos declaran en un pleito celebrado a comienzos del siglo XVI, Ladrón de Leiva estaba loco y, su hijo, necesitaba tomar posesión de los títulos y mayorazgo de la casa de Leiva.
Así, ya el 24 de noviembre de 1461, se solicitaba a Juan de Leiva y a Constanza de Mendoza, su mujer, que nombraran a una persona que tasara las obras y edificios de la torre de Anguiano, junto con otra persona nombrada por Pedro Manrique“…cuya es la villa de Ezcaray…”
El 29 de febrero de 1502 incorporó Juan de Leiva a sus propiedades la villa de Tobía, la cual compró a Antonio Velasco de Zúñiga, conde de Nieva. Previamente, el 24 de enero de 1501, Francisca de Zúñiga, mujer del conde de Nieva, como propietaria de la villa de Tobía, por pertenecer a su mayorazgo, autorizó su venta y, el 8 de mayo de 1501, los reyes Isabel y Fernando dieron su permiso para sacar la villa del mayorazgo. En éste se aclara que Antonio de Velasco debía dinero a Francisco de Tovar y a Catalina, su mujer, y a María de Zúñiga, por un pleito que habían litigado sobre la villa de Valverde, pero también al monasterio de Santa Catalina de Toledo, al de Santa Clara de Valladolid y al de Santa María de la Estrella en La Rioja, por razones que no se aclaran. Teniendo que elegir entre un juro sobre ciertas rentas que tenían en Sevilla y la villa de Tobía, optaron por la segunda, otorgando su escritura de venta en la fecha indicada del año 1502. Se vendió la villa con todas sus “… sus entradas e salidas, prados e pastos, montes e dehesas, aguas estantes e manentes e todas las otras cosas perteneçientes a la dicha villa e como el conde y condesa, desde la piedra del rio fasta la foja del monte e de foja del monte fasta la piedra del rio, la qual dicha villa vos vendemos con todos sus vasallos…”, estableciendo su precio en un cuento y 700.000 maravedís.
La necesidad de mantener todas las posesiones juntas motivó la fundación de los mayorazgos, el 15 de mayo de 1504, Juan Martínez de Leiva solicitó permiso a los Reyes Católicos para agregar ciertas propiedades al mayorazgo antiguo fundado en 1452 por Sancho Martínez de Leiva, su abuelo, al tiempo que nombraba como heredero a Sancho Martínez de Leiva, su hijo mayor, con la aprobación de Juan y Antonio de Leiva, sus otros hijos, para que después de él lo heredera su hijo mayor, Juan Martínez de Leiva, nacido de su matrimonio con Francisca de Guevara. La petición fue aceptada, mandando que ésta fuera cumplida por los príncipes Felipe y Juana, así como por cualquier otra persona, independientemente de su clase y condición social. Se establece como condición que, en caso de cometer algún delito, Sancho Martínez de Leiva o el que sucediera en el mayorazgo, perdería todos lo recibido.
Los bienes sobre los que Juan Martínez de Leiva fundó su mayorazgo aparecen detallados claramente, al tiempo que se deja constancia de aquellos que se eliminan, respecto a la anterior fundación. Así, desaparecieron Ezcaray, Zorraquín, Valgañón y Pradilla, al venderlas a su cuñado Pedro Manrique, incorporando otras que se añaden desde entonces entre los bienes que formaban parte del mayorazgo, los cuales eran los siguientes: Leiva; San Millán de Yécora; Velasco; Baños de Rioja; Tirgo; Ochánduri; Villapún; Villar de Torre; Santurde; Anguiano; Villanueva; Ventosa; Tobía?; un molino y las heredades anejas, una casa en la “…calle de Medyo…” y otra con su huerta en el Barro Viejo, todos en Santo Domingo de la Calzada; un molino y otras heredades en Castañares; 18.500 maravedís de un juro que compró en la villa de Miranda a Diego de Mendoza y Leonor, su mujer, y Ruy Díaz, su hijo; 14.000 maravedís que pertenecieron a un juro de Elvira de Guzmán, su abuela, e Inés de Herrera, su madre; 10.000 maravedís que Constanza de Mendoza, su mujer, tenía en los diezmos de cámara de la ciudad de Burgos; los maravedís de un juro que compró a Diego de Londoño y sus herederos; los maravedís de un juro que compró a García de Mendoza y Ortega de las Cuevas; una casa y heredades en Villoria y en San Pedro del Monte, las cuales compró a Tristán Zarniga y su mujer, a Ortega de las Cuevas y a Juan de Salinas; unas heredades en Tormantos, compradas a Juan de Chacón, Diego del Casatillo y Catalina de Gaona, vecinos de Burgos; y unas heredades en Herramélluri, que habían pertenecido a Pedro Ruiz de Ahumada y los de Estrada, vecinos de Villalobar.
En cuanto a la actividad de Juan Martínez de Leiva, fuera de su territorio, es necesario señalar que tuvo un papel destacado en la guerra de Portugal y durante diez años, hasta que en 1492 se consiguió la conquista de Granada, estuvo presente en la lucha contra los árabes.
Finalmente, luchó en Francia y sucedió a Enrique Enríquez y a Sancho de Castilla, como general del ejercito en el Rosellón y la Cerdaña. Las estancias de Juan Martínez de Leiva fuera de sus dominios le obligaban a contar con un alcaide de su “…fortaleza e castillo e villa…”, ocupando tal cargo en 1488 Martín Salgado.
Conocemos este punto porque Juan Gutiérrez lo acusaba de proteger a su mujer, María Gutiérrez, la cual “…syn su licençia se ovo salido e salio de su casa e escondida…”, llevándose algunos bienes propiedad de su padre, Pedro Gutiérrez. En ese año se le impuso una pena de 20.000 maravedís a María Gutiérrez sino pasaba a disposición de la justicia.
Casado en primeras nupcias con Constanza de Mendoza (muere en 1501), madre de sus cinco hijos, y en segundas con Mayor de Haro. Por lo cual notamos, que el anterior pacto de matrimonio que hicieron con los Manrique no se cumplió. A causa de la locura de su padre, "tuvo que asumir muy pronto el gobierno de la casa y mayorazgo de Leiva y Baños, papel en el que se mostró muy activo hasta 1507, fecha en la que falleció, en Cáceres" (Mª Teresa Álvarez y Javier Ceniceros, "El castillo de Leiva: Aproximación a sus señores y al proceso constructivo".
Doña Constanza Hurtado de Mendoza, esposa y sobrina 4, descendiente entre otros, de don Tello de Castilla, Infante. Señor de Aguilar de Campoo, Castañeda, Berlanga, Monteagudo, Señor consorte de Lara y de Vizcaya y de don Pedro López de Ayala.
En 1507 vende la villa de Anguiano a Pedro Gómez Manrique, señor de Valdezcaray, por la cantidad de 6 millones y 6 quentos. Esa cantidad de dinero era bastante desmesurada para la época. Lo más probable es que esa transacción aliviara la economía de la familia con sus muchos compromisos en el servicio de armas y también enfriara un poco la tensión con dicha familia.
Poco tiempo después del luctuoso suceso (1507), Mayor de Haro, reclamó a los hijos de Juan Martínez de Leiva que le devolvieran los 200.000 maravedís de la dote que había aportado al matrimonio, sobre lo cual entablaron un pleito. En el proceso de éste, su viuda se queja amargamente de la treta utilizada por Sancho Martínez de Leiva para quitarle las escrituras propiedad de la familia, que estaban en Baños de Rioja, guardadas en un arca y necesitaban encontrar el testamento de Juan de Leiva. El hijo de éste envió a un cuñado a Baños, haciendo saber a Mayor de Haro que Juan de Leiva “…quedava malo…”, por lo que mandaba buscarla y que llevara consigo el arca con las escrituras, cuando llegaron a Leiva, la mujer de Sancho Martínez de Leiva se quedó con el arca y le confirmaron a Mayor de Haro que su marido hacía al menos tres semanas que había muerto. El proceso fue largo porque en una ejecutoria de 1517 ya se hace referencia a la petición de Mayor de Haro y hasta el 14 de octubre de 1525 no se dio una resolución final, obligando a pagar los 200.000 maravedís de la dote a Sancho, Juan, Antonio, Inés y a los hijos de Pedro de Cartagena, el cual debía tener algún parentesco con Alonso de Cartagena, marido de Ana de Leiva, que ya había fallecido en esa fecha.
Los problemas a la muerte de Juan Martínez de Leiva, son un reflejo de la gran actividad con la que vivió. Finalmente, señalar que sobre la forma de ser de Juan de Leiva, uno de los señores más activos en cuanto al engrandecimiento de su casa, pese a que se le impute la venta de Ezcaray, sabemos gracias al pleito que por su herencia hubo entre sus hijos a comienzos del siglo XVI, que éste debió tener un carácter bastante fuerte, describiendo que “…fue un onbre muy reçio, e muy astero e brabo con sus fijos e criados de su casa, que todos le temian e temblaban delante del e que en espeçial sus fijos, e sus fijos no osaban hazer otra cosa sino lo que el dicho Juan de Leyba les mandaba segund les tenia sugetos e ellos le tenian temor e miedo e mucha reverencia paternal…”.
Castillo de Leiva.
Ellos tuvieron a doña Inés de Leiva Guzmán (c. 1500-c. 1550), cuyo apellido heredó de su abuela materna, doña María de Guzmán Carrillo de Acuña, hija del señor de Orgaz, en Toledo.
Juana I, reina de Castilla (1504-1555).
Tras casar, él (Juan de Arce Mújica), y su esposa "salieron de las tierras de Juan de Leiva para ir a casa de sus padres en Guriezo"
Hubo un pleito celebrado entre 1518 y 1545 en el que Inés de Leiva, hija de Juan de Leiva, reclama a sus hermanos Sancho y Antonio, la parte que le correspondía de la herencia de su padre y la dote de su madre. Es su hermano Sancho el que hereda el mayorazgo de Leiva.
ASENTÁNDOSE EN LIENDO.
Casó con Juan de Arce Mújica, señor de la casa de Arce en Liendo y Guriezo, descendiente de su homónimo don Juan de Arce y Solórzano, señor de los lugares de Villarías, Besave y Valderrojo. Procedente de Francia, en el siglo XV se instaló en el Valle de Guriezo (Cantabria).
Sobre 1540, tuvieron a doña Inés de Leiva. Casó con Pedro de Palacio, señor de la Casa de Palacio.
Desciende este apellido de la antigua familia de parientes mayores de Vizcaya, fundada en el siglo XIII por Lope Sánchez de Gordejuela, hijo natural del sexto Señor de Ayala Don Furtud Sánchez de Salcedo. Lope Sánchez construyó la primitiva torre de banderiza de Palacio y fundó el solar de este apellido y el de Ibargoen en el citado Valle durante el siglo XIII.
Los Palacio ejercieron la jefatura del bando oñacino en el valle de Gordejuela, durante las luchas banderizas de los siglos XIII y XV, contra los Ibargoen, del bando gamboíno. El Capitán Don Juan de Palacio y del Hoyo, Caballero profeso de la Orden de Santiago, fue Corregidor y Capitán a Guerra de la Gran Canaria, Tenerife y La Palma, y Gobernador de las Cuatro Villas de la Costa de Cantabria. Era hijo de Pedro Gil de Palacio, Señor de la Casa solariega y Torre de P. del Valle de Liendo y de Doña María del Hoyo Gavilán y Palacio de Gama, su mujer y prima. Una hermana del Capitán Palacio, Doña Francisca de Palacio y del Hoyo, bautizada en 13 de junio de 1608, casó con Don Juan de Laisequilla Martínez de Bolde Vélez y Marrón, III del nombre, dueño, Señor y pariente mayor de la Casa infanzona de su apellido, Regidor y Alcalde por el estado noble del Valle de Liendo.
Felipe I, rey de Castilla (1506).
Sobre 1580 tuvieron a otra doña Inés de Palacio Leiva , quien heredó el mayorazgo de Palacio, en Liendo. Fue entonces, señora de la Casa de Palacio.
Imagen basada en un cuadro de el Greco de la figura de su primo segundo Don Alfonso Martínez de Leiva y Hurtado de Mendoza. Apariencia aproximada de la joven.
Liendo, una hermosa localidad con montañas, de Cantabria.
Casó con el escribano Pedro Pérez de Sopeña Palacio.
Rúbrica de don Pedro Pérez de Sopeña Palacio.Su hijo fue Lorenzo de Palacio Leiva (c.1600-Liendo, 20 de mayo de 1675). Regidor. Licenciado. Teniente General de la Encartaciones de Vizcaya. Casó con la laredana noble, doña Ana María de Escalante Somado del Hoyo, hija de García de Escalante del Hoyo, quien era abogado de la Chancillería de Valladolid. Regidor perpetuo de Laredo. Abogado del Santo Oficio de la Inquisición.
Doña Ana María de Escalante Somado del Hoyo. (Fotografía alegórica)
De las siguiente generaciones, ya existe información en este blog, a la cual pueden acceder, a través del buscador.
Felipe III, rey de España (1598-1621).
Felipe IV, rey de España (1621-1665).
Carlos II, rey de España (1665-1700).
*Nota:
Doña Beatriz de Suabia (1205-1235), noble alemana y reina consorte de Castilla y León.
Fuentes:
- https://lbm1948.es/TNG/getperson.php?personID=I5786&tree=tree1
- Wikipedia.
- https://manista.blogs.com/leiva/files/castillo_leiva.pdf