Momia del Hombre de Sal.

Cabeza de la momia.


Ahora pasamos a Irán, un lugar donde no es típico hallar momias, pero que sin embargo al haber estado en una mina de sal, ésta hizo que se conservara el cuerpo de este buen hombre.


Este hombre que vivió sobre el 300 d. C. bajo la dinastía Aqueménida o Partia en el Imperio Persa, era un hombre de alto rango. Se le enterró con varios objetos como herramientas y cerámicas, y también una honda, 3 cuchillos, algunas nueces, una aguja de plata, un arnés, y trozos de cuerda de cuero.


Se le encontró una fractura cerca del ojo, que le tuvo que ocasionar daños no solo estéticos sino de visión y otros más graves. Vestía con un pantalón de lana, botas de cuero y tenía un pendiente de oro en la oreja izquierda. Algunos presumen de que esto de los pendientes en los hombre es estar a la moda. Ya podemos ver que es más viejo que el mear (que diría mi madre).
Su grupo sanguíneo era B+.


Se le encontró en la aldea Hamezhlu, al oeste de la ciudad de Zanjan, provincia de Zanjan, Irán, en 1993.



Expuesta en el museo.