NO HAY NADA NUEVO BAJO EL SOL.
Así podríamos decir cuando hablamos del pasado. Sin contar con el hecho de que hoy día existen mejoras científicas y médicas que permiten que una persona no padezca o no muera debido a cierta enfermedad-sea por medio de la dieta, las vacunas, los instrumentos de diagnóstico, o la cirugía-las enfermedades que existen hoy día, ya existían desde el inicio de la humanidad. Y no lo digo yo, lo dicen las momias que cada día se encuentran y se estudian.
Por supuesto, en estos días, la expectativa de vida de una persona, ronda los 75 años, dependiendo del país. Eso contando con que esa persona viva sin riesgos (fumar, beber en exceso, y demás), y no muera en un accidente de tráfico.
Como decíamos, las personas de la antigüedad padecían de enfermedades como por ejemplo, la tuberculosis, malaria, parasitosis, tenían piojos, cáncer, problemas óseos, problemas vasculares, artritis, artrosis, obesidad, varicela, viruela, sarampión, triquinosis, sífilis, lepra, enfermedad de Chagas, todas asociadas a la dieta, la forma de vida, y por supuesto las infecciosas a la mala suerte. Padecían cálculos en las vías biliares y todas las patologías que hoy cualquier persona pudiera tener, con la diferencia que no había farmacias, ni centros de salud.
Al estudiar cómo vivían las personas del pasado, y dónde, se pueden determinar qué enfermedades podrían tener. Los que vivían en cuevas, tenían que calentarse, y cocinar los alimentos al fuego, y ésto lo hacían dentro de la cueva. El aspirar tanto monóxido de carbono dañó los pulmones de la gran mayoría, lo que pasa que, eran otras las enfermedades que les mataban, o alguna guerra, o algún animal salvaje en alguna cacería. Si hubieran vivido más tiempo, quizás hubieran desarrollado enfisema pulmonar o cáncer, como un fumador de hoy día.
Aunque aquí la hoguera está fuera, nos imaginamos lo que sería tenerla dentro de la cueva día y noche.
Tendrían también las muelas desgastadas, cariadas, y sería difícil ver a alguien con 30 años y todos sus dientes. Esto era no solo por la forma de comer los alimentos sino porque comían con arena, y esto desgastaba su esmalte.
Al comer sin higiene, alimentos medio crudos y agua no siempre apropiada todos padecerían de parasitosis en mayor o menor medida, al igual que la mayoría tendrían piojos. Se han encontrado momias con piojos y liendres hasta en las cejas. Así que estos pequeños bichitos ya existían y molestaban hacía milenios.
La mayoría de las personas en ésta época, estamos hablando de hace 4000 0 5000 años, padecían algún problema óseo, relacionado con la carga y el trabajo pesado. Algunos tendrían problemas con los cálculos, y padecerían dolores horrorosos.
También cada día se enfrentaban a la posibilidad de enfermedades infecciosas en especial en la niñez, que a miles de niños les llevaría a la tumba. Estamos hablando de una natalidad alta, pero una estadística de muerte infantil y materna muy alta. La expectativa de vida era como de 30 años.
Casi todos los cuerpos momificados de ésta época que se han encontrado también padecen de infecciones virales o bacteriológicas en el intestino.
A los 30 años tenían el aspecto de alguien de 50 años más o menos.
Entre los egipcios se han encontrado momias, la mayoría de nobles o faraones, o sea personas de alto rango y con una vida más envidiable que la de cualquier egipcio normal, como decía, se han encontrado patologías como la tuberculosis, la malaria, parasitosis, y problemas óseos.
MOMIA DE RAMSÉS II.
Como algo que se sale de lo habitual tenemos la momia de Ramsés II quien vivió unos 92 años.
El estudio de la momia de Ramsés II ha revelado que en sus últimos años de vida andaba encorvado, pues sufría artritis y deformaciones en la columna vertebral, así como severos daños dentales. Bueno, a esa edad ya era tiempo, ¿no?.
POSIBLE ASPECTO DEL FARAÓN TUTANKAMÓN.
MOMIA DE TUTANKAMÓN.
Tutankamón murió a los 19 años, y padecía de tuberculosis, malaria, la peor, y tenía una afección ósea que le hacía necesario caminar con bastón. Así que hablando de forma clara era un impedido que había que ayudarle a hacer casi todo, y que su salud le dejaba exhausto cada día por lo frágil que era. La reconstrucción de cómo era tenemos que decir que es relativa pues aunque los parámetros de la cara sí son totalmente categóricos, hay mucho detalle que se deja a elección del artista. Es cierto que se intentan acercar por los rasgos de los posibles egipcios, pero hay mucho que se deja a la imaginación. Su cara debería reflejar más el dolor y el avejentamiento que debió padecer en sus rasgos. Se le reconstruyó demasiado orgulloso, magnífico, demasiado sano diría yo.
En la Edad Media se han encontrado momias con cálculos biliares grandísimos, tumores, artritis, artrosis, sífilis, tuberculosis, peste, problemas cardiovasculares, y demás...
CUADRO DE WIKIPEDIA.
La mayoría de las personas en ésta época, estamos hablando de hace 4000 0 5000 años, padecían algún problema óseo, relacionado con la carga y el trabajo pesado. Algunos tendrían problemas con los cálculos, y padecerían dolores horrorosos.
También cada día se enfrentaban a la posibilidad de enfermedades infecciosas en especial en la niñez, que a miles de niños les llevaría a la tumba. Estamos hablando de una natalidad alta, pero una estadística de muerte infantil y materna muy alta. La expectativa de vida era como de 30 años.
Casi todos los cuerpos momificados de ésta época que se han encontrado también padecen de infecciones virales o bacteriológicas en el intestino.
A los 30 años tenían el aspecto de alguien de 50 años más o menos.
Entre los egipcios se han encontrado momias, la mayoría de nobles o faraones, o sea personas de alto rango y con una vida más envidiable que la de cualquier egipcio normal, como decía, se han encontrado patologías como la tuberculosis, la malaria, parasitosis, y problemas óseos.
MOMIA DE RAMSÉS II.
Como algo que se sale de lo habitual tenemos la momia de Ramsés II quien vivió unos 92 años.
El estudio de la momia de Ramsés II ha revelado que en sus últimos años de vida andaba encorvado, pues sufría artritis y deformaciones en la columna vertebral, así como severos daños dentales. Bueno, a esa edad ya era tiempo, ¿no?.
POSIBLE ASPECTO DEL FARAÓN TUTANKAMÓN.
MOMIA DE TUTANKAMÓN.
Tutankamón murió a los 19 años, y padecía de tuberculosis, malaria, la peor, y tenía una afección ósea que le hacía necesario caminar con bastón. Así que hablando de forma clara era un impedido que había que ayudarle a hacer casi todo, y que su salud le dejaba exhausto cada día por lo frágil que era. La reconstrucción de cómo era tenemos que decir que es relativa pues aunque los parámetros de la cara sí son totalmente categóricos, hay mucho detalle que se deja a elección del artista. Es cierto que se intentan acercar por los rasgos de los posibles egipcios, pero hay mucho que se deja a la imaginación. Su cara debería reflejar más el dolor y el avejentamiento que debió padecer en sus rasgos. Se le reconstruyó demasiado orgulloso, magnífico, demasiado sano diría yo.
En la Edad Media se han encontrado momias con cálculos biliares grandísimos, tumores, artritis, artrosis, sífilis, tuberculosis, peste, problemas cardiovasculares, y demás...
| Eras | Esperanza de vida media al nacer (años) | Comentario |
|---|---|---|
| Paleolítico superior | 33 | A la edad de 15: 59 (hasta una edad de 54) |
| Neolítico | 20 | |
| Edad del Bronce | 35 | |
| Grecia Clásica | 28 | |
| Antigua Roma | 28 | |
| Norteamérica Precolombina | 25-30 | |
| Califato Islámico medieval | 35+ | La longevidad media de las élites era 59–84.3 años en oriente medio y de 69–75 en Al-Ándalus. |
| Gran Bretaña en la edad Media | 30 | |
| Inicio del siglo XX | 30-45 | |
| Media Mundial actual | 67,2 | 2009 est. |
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